LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los familiares del concejal de San Bartolomé de Tirajana fallecido en el accidente aéreo de Madrid, Laudencio García, ha agradecido con un "fraternal abrazo" a políticos, instituciones y amigos el apoyo mostrado en "estos interminables días" con "innumerables pruebas de cariño", según un comunicado hecho llegar por el consistorio del sur de la isla.
"Al ser materialmente imposible agradecer personalmente las innumerables pruebas de cariño a todos los responsables políticos, institucionales, amigos y demás compañeros de trabajo, queremos aprovechar los medios de comunicación canarios para haceros llegar un fraternal abrazo que os devuelva, en la medida de lo posible, el calor que nos habéis hecho llegar en estos interminables días", reza el texto de la familia del concejal.
En este sentido, la familia quiso "agradecer a todas las autoridades nacionales, autonómicas, locales y eclesiásticas; así como a los colectivos políticos, y sociales de Gran Canaria y, en particular, de San Bartolomé de Tirajana, el cariño, afecto, comprensión y ayuda prestada durante estos días en los que hemos vivido la peor tragedia que jamás podríamos imaginar".
A continuación, lanzaron unas palabras tanto sobre el concejal fallecido como de su mujer e hijos. Sobre García, aseguraron que "su sonrisa en cada una de sus actuaciones; bien como líder vecinal, bien como político o como director de los colegios públicos Las Dunas, Oasis y Pepe Monagas han sido alguna de las cosas que más nos habéis recordado estos días con vuestras llamadas telefónicas y vuestros mensajes". "Lo que significa que su implicación en pro del bienestar de sus convecinos o su colaboración con UNICEF o Médicos Sin Fronteras ha dejado una semilla que ha caído en buena tierra y no tardará en dar fruto", desearon.
"Como no podría ser de otra manera, su mujer, Lucrecia, ocupará para siempre un lugar privilegiado en nuestros corazones. Además de una excelente maestra en el colegio público Pepe Monagas, nuestras familias y San Bartolomé han perdido a una persona valiente, optimista; sostén de su familia y enamorada de su trabajo y sus dos hijos, cuyas vidas se han truncado en el mejor y más dulce de los momentos", se explica en la carta.
LOS NIÑOS YA SE HABÍAN "IMBUIDO DE BONDAD"
A continuación, se refieren a los hijos de la pareja. "Nos permitirán que dediquemos, aunque solamente sea un par de líneas a Elena y Carlos, que con 16 y 14 años, respectivamente, habían heredado de sus padres la sensibilidad, el amor por el trabajo y el cariño a los demás. Dos almas que aún no conocían nada de la vida, pero que ya se habían imbuido de bondad, disciplina y sensibilidad por los más frágiles. Laudencio, Lucrecia, Carlos y Elena ya descansan en paz".
