SANTA CRUZ DE TENERIFE, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife detuvieron, la pasada noche, a un hombre de 37 años como el presunto autor de una agresión a su pareja y que, posteriormente, también golpeó a dos familiares de la víctima. El detenido fue identificado como R.P.A. y, en el momento de su arresto, esgrimía una barra metálica de gimnasio. Durante la refriega un agente resultó lesionado al intentar mediar entre las partes enfrentadas.
Un policía que estaba prestando servicio en la zona de Los Campitos fue requerido por unos vecinos debido a una reyerta que se estaba produciendo en el exterior de un domicilio cercano, según informó el cuerpo policial en un comunicado. Tras solicitar refuerzos a la Sala de Radio Control, el agente se dirigió al lugar de la trifulca encontrándose a cuatro personas peleándose. Varios de los contendientes portaban barras metálicas e incluso un garrote de madera.
El agente intentó calmar los ánimos y mediar en la reyerta, pero fue golpeado con una barra de hierro sin poder determinar al autor del golpe. En ese instante llegó el resto de la dotación policial que, tras separar a ambas partes, trató de esclarecer los hechos.
La víctima, que reconoció ser la pareja sentimental del detenido, manifestó que, tras una discusión, fue golpeada por R.P.A. y que, a continuación, su hijo y un hermano habían tratado de defenderla. Estos dos últimos, el hijo, de 30 años, y el hermano de la agredida, de 46, señalaron que habitualmente el detenido agredía a su familiar y que esta vez habían intentado socorrerla.
En la pelea resultaron heridos tanto el hijo, que presentaba un profundo corte en una de sus piernas y tuvo que ser evacuado al Hospital Universitario Nuestra Señora de La Candelaria (Hunsc), como el propio detenido, que también presentaba señales de haber recibido algunos golpes.
CON ORDEN DE ALEJAMIENTO
En el interior del domicilio se produjeron múltiples daños y la víctima mostró a los agentes una orden de alejamiento dictada contra R.P.A. aunque, sorpresivamente, la mujer renunció tanto a ser asistida de sus lesiones como a presentar denuncia contra el detenido.
