La Consejería canaria de Sanidad realiza 116 trasplantes renales y 40 hepáticos en 2011

Actualizado: miércoles, 4 enero 2012 13:48

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias realizó 116 trasplantes renales y 40 trasplantes hepáticos durante 2011, un 10% más que en 2010. De los trasplantes renales, siete fueron combinados con un páncreas, realizándose, además, un trasplante de páncreas aislado, contabilizándose 73 donaciones por muerte encefálica y seis de donante vivo.

De esta manera, esas donaciones permitieron que se beneficiaran 157 pacientes en la Comunidad Autónoma, nueve más que en el ejercicio anterior, informó el Ejecutivo regional en un comunicado.

Según datos de la Coordinación de Trasplantes de Órganos y Tejidos de la Dirección General de Programas Asistenciales, esta cifra representa una tasa de 34,32 donantes por millón de población (pmp).

Por su parte, del total de donaciones por muerte encefálica, 15 fueron en el Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria (HUNSC); 18 en el Hospital Universitario de Canarias (HUC); siete en el Hospital General de La Palma; 15 en el Complejo Hospitalario Universitario Insular Materno Infantil; 17 en el Hospital Universitario de Gran Canaria Dr. Negrín y el último, hasta alcanzar los 73, en el Hospital Dr. José Molina Orosa de Lanzarote.

Las seis donaciones de donante vivo se realizaron en el HUC, aunque los pacientes y los donantes provenían de todas las islas. La principal ventaja frente a la donación de cadáver es que la supervivencia del injerto renal y del paciente es mayor en el caso de donante vivo.

Canarias impulsa desde 2007 este programa que debe llevarse a cabo con individuos emparentados genéticamente, o bien con otras personas en la que exista un lazo de afectividad.

Finalmente, la Consejería explicó que la concienciación y generosidad de los familiares se plasmó en un 86.91% de consentimientos a la donación, resaltando además el carácter solidario de las familias que viven en las islas y que hacen posible que los pacientes que necesitan un trasplante para seguir viviendo, o mejorar su calidad de vida, tengan las máximas posibilidades de conseguirlo.