El Diputado del Común asegura que "durante el franquismo la administración funcionaba mejor"

Actualizado: jueves, 2 julio 2009 15:44

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Diputado del Común, Manuel Alcaide, ha asegurado este jueves que "en la época del franquismo, no había Defensor del Pueblo, y creo que ni falta que hacía" al tiempo que añadió que "las administraciones estaban muy controladas, se regían como si fuera un cuartel y funcionaban mucho mejor".

Alcaide, al que el PSOE en el Parlamento de Canarias le ha retirado recientemente su confianza, explicó en una entrevista a 'Diario de Avisos' recogida por Europa Press que la el órgano estatutario que representa es "una entidad extraña". "Es un comisionado del Parlamento para supervisar la gestión de las administraciones públicas de Canarias; es decir, supervisamos al Gobierno, a los cabildos, a los ayuntamientos y a todas las oficinas públicas", apostilló.

"En la época de Franco, la administración era como un cuartel. Existían funcionarios, secretarios, interventores, depositarios..., y estaba todo reglado porque eran funcionarios profesionales. Cuando llega la democracia a los ayuntamientos, pues se confunden, porque ya intervienen concejales que pueden tener preparación o no. En definitiva, el mundo administrativo se ha complicado excesivamente y ese es el trauma que nosotros tenemos", insistió.

Asimismo Alcaide admitió que "la gente no entiende lo qué es" el Diputado del Común. "Hay que transformar y educar y decirle a la gente que es lo mismo que el Defensor del Pueblo", dijo al tiempo que indicó que la institución "sirve para precipitar y agilizar las quejas de los ciudadanos frente a una administración".

"Y ENCIMA TE INSULTAN"

Sobre los cuestionamientos que ha recibido desde el Parlamento de Canarias, Alcaide indicó que "en la Comisión se metieron conmigo porque dijeron que el informe que había hecho no estaba redactado por un jurista de prestigio como había sido yo". "El problema está en que no saben lo qué es el Diputado del Común. Manuel Alcaide es el director de una institución con una serie de funcionarios y asesores y esta gente recibe al pueblo y, en base a eso, elabora el informe anual".

Aquí admitió que su situación es "frustrante" y admitió que "le insultan y le han pedido la dimisión". "Nuestro mandato es de cinco años y una vez finalizado hay que renovar o elegir a otro nuevo, pero no lo han hecho. Me imputan la continuidad. Y yo les digo que no me trasladen a mi esta responsabilidad. Son ustedes (los políticos) los que tienen que ponerse de acuerdo, no yo. Y lo lamento porque en el fondo duele", concluyó.