La fiscal Ríos temía que Rosell archivara la causa de Ramírez tras pedir dos veces sus declaración sin éxito

El juez Salvador Alba con el abogado Pedro Ayala a su llegada a la Audiencia Provincial de Las Palmas
El juez Salvador Alba con el abogado Pedro Ayala a su llegada a la Audiencia Provincial de Las Palmas - EUROPA PRESS
Publicado: martes, 2 julio 2019 16:08

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

La fiscal decana de Asuntos Económicos de la Fiscalía de Las Palmas, Evangelina Ríos, ha afirmado este martes durante el juicio contra el magistrado Salvador Alba --suspendido en sus funciones por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ)-- que temía que Victoria Rosell, titular del Juzgado de Instrucción Número 8 de Las Palmas de Gran Canaria, archivara la causa contra el empresario Miguel Ángel Ramírez en el marco del procedimiento 6/44, después de que solicitara en dos ocasiones la declaración del mismo pero sin éxito.

Sin embargo, valoró positivamente que el juez sustituto de Rosell accediera a tomar declaración al empresario Miguel Ángel Ramírez, algo que le "encantó", ya que la causa investigaba un delito contra la hacienda pública de Seguridad Integral Canaria, empresa del también presidente de la UD Las Palmas.

Así, Evangelina Ríos ha afirmado que estuvo presente en todas las declaraciones hechas hasta el momento en ese caso, que continúa abierto y que está en fase de diligencias previas.

De este modo, admitió que si bien estuvo presente en la declaración de M.A. Ramírez del 23 marzo de 2016, "no" tuvo conocimiento "ni antes ni inmediatamente después por parte de Alba" sobre la reunión que el mismo mantuvo con Ramírez, cuestión de la que aseguró se enteró cuando el empresario y también presidente de la UD Las Palmas presentó el pendrive con la grabación de la misma en los juzgados y su contenido aparece en los medios de comunicación.

Previamente a estos hechos, Ramírez declaró en calidad de investigado por delitos a la hacienda pública sobre el procedimiento que tenía abierto por Seguridad Integral Canaria en abril de 2014, se le vuelve a tomar declaración en noviembre de 2015 para imputarle entonces delitos contra la hacienda pública y la Seguridad Social, al igual que a Héctor de Armas --también responsable de la empresa de seguridad-- a quien se le toma declaración el 4 de diciembre.

RÍOS ACUSA A ALBA DE FALTAR "A LA VERDAD"

Durante el proceso en el que Alba está al frente de este procedimiento, Ríos ha admitido que su comunicación con Alba fue "fluida, frecuente, de entendimiento y colaboración en todo momento" pero incidió en que el magistrado "nunca" le habló de esa reunión con Ramírez, por lo que al enterarse de la misma tuvo una conversación "larga y, por el momento, acalorada" con Alba.

"Falta a la verdad --Salvador Alba--, porque es absolutamente falso que él me dijera nunca nada de esa reunión", apostilló.

Si bien, en el marco de la investigación, expuso que el juez Alba le dijo que había detectado en el libro diario de Seguridad Integral "ciertos pagos" de Héctor de Armas que le "parecían curioso", en concreto, pagos de Seguridad Integral Canaria a Clan de medios, comunicación y marketing que rondaban entre los 40 y 60 euros mensuales por una alarma.

Así, posteriormente, Ramírez declara el 23 de marzo de 2016 donde ratificó lo dicho en otras declaraciones y matizó algunas partes, provocando seguidamente que las defensas realizaran un "aluvión de peticiones" de archivo de la causa, que estaban "muy fundamentadas", algo que trasladó a Alba, a quien además le remitió una guía sobre el procedimiento que le "podía servir de orientación para ir a tiro hecho y se lo ponía a su disposición".

Tras esta declaración, señaló que Alba le dijo a Ramírez que se iba a acordar el sobreseimiento por el delito contra los trabajadores, algo que la fiscal "realmente no" veía tampoco que estuviera.

Asimismo, apuntó que Alba "nunca" le comentó "nada de sobreseimiento" del procedimiento, si bien "alguna vez" pensó que esto sí podía ocurrir con Rosell.

RELACIÓN ENTRE RAMÍREZ Y SOSA

En cuanto a la relación comercial entre Miguel Ángel Ramírez y Carlos Sosa, responsable de Clan de Medios, tras llegarle a ella un sobre a su nombre con el contrato que mantenían ambos, indicó que en la declaración del 23 de marzo de 2016 le "quedó claro" que la relación comercial entre Ramírez y Sosa había quedado suspendida en el año 2009, al quedar reflejado, según Ramírez, que éste "concedía un préstamo a Sosa a cambio de ampliación de capital, que nunca se llevaba a efecto porque las sociedades dejaban" de funcionar.

Así al ser cuestionado entonces Ramírez por cómo recuperaba el dinero, le indicó que esa cantidad Sosa "se lo pagaba en publicidad" en la siguiente sociedad que creaba. De todos modos, apuntó que "puede ser" que la relación de Sosa y Ramírez se mantuviera a través de un servicio de limpieza de Ralons --empresa también de Ramírez-- en Clan de Medios en el año 2011.

"No me quedó nada claro qué tipo de relación comercial tenían Sosa y Ramírez, y las empresas de ambos", apostilló.

La fiscal ha hecho mención a las discrepancias que ella mantuvo con Rosell por el ritmo de este procedimiento, "retrasos" de los que posteriormente Alba informaría al presidente del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC), Antonio Doreste, como así se lo indicó el juez a ella.

GRABACIÓN DE LA REUNIÓN ENTRE ALBA Y RAMÍREZ

Durante el juicio contra Salvador Alba, en la mañana de este martes también han declarado otros testigos entre los que se encontraba un primo hermano de Miguel Ángel Ramírez, que cuando se produjeron estos hechos era el jefe de sistema de Seguridad Integral Canaria.

Este testigo, que responde a las iniciales de O.E.R. ha admitido que Ramírez solicitó un dispositivo de grabación como ya había hecho en "otras ocasiones" y le pidió que se pareciera al "mando de un coche, como una llave de coche", grabadora que se la devolvería por la tarde ese mismo día.

Ramírez le solicitó entonces, según O.E.R., que le pasara la información de esa grabación a un pendrive y que, posteriormente, formateara el dispositivo y borrara los archivos de audio, que dijo creer que eran dos.

Por último, entre los testigos que han declarado este martes, se encuentra el agente de la Guardia Civil que transcribió el contenido de la grabación tras serle asignada la tarea por parte de su jefe, quien aseguró que en la misma hay "algunos fallos" por su "afán de intentar facilitar la transcripción. Fallos ortográficos y de personas que no tenía que estar".

Cuestionado por cómo sabe quienes son los que hablan en dicha grabación, expuso que por "conocimiento del medio, del sistema".

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