El gasto por habitante del Gobierno de Canarias es el quinto más bajo de todas las autonomías en 2007

Actualizado: domingo, 12 agosto 2007 22:00


Santa Cruz de Tenerife, 12 Ago. (EP/IP) -

El gasto por habitante del Gobierno de Canarias en 2007 es el quinto más bajo de las 17 autonomías del Estado. Los presupuestos generales regionales, elaborados por el Ejecutivo de la VI legislatura de Adán Martín, asignan una inversión de 3.415,91 euros por cada canario, 46,24 euros menos que la media de las 14 autonomías de régimen común y lejos de los 3.524,62 euros de media de todos los presupuestos autonómicos del ejercicio económico en vigor. El fuerte peso de las competencias sanitarias, educativas y de servicios sociales convierten a la población en un elemento determinante de las políticas de responsabilidad de la Comunidad Autónoma canaria.

Un análisis sobre los presupuestos autonómicos de 2007, publicado por el Instituto de Estudios Fiscales del Ministerio de Economía y Hacienda, incluye un estudio comparado sobre el gasto por habitante de cada autonomía, las 15 de régimen común más Navarra y el País Vasco, con el que se pone en evidencia el interés y la capacidad de los gobiernos regionales para suministrar los servicios de su competencia, principalmente, la sanidad, la educación y los servicios sociales.

El gasto medio por habitante de las 17 autonomías asciende a 3.524,64 euros, una cantidad ligeramente superior al correspondiente a las comunidades de régimen común, que es de 3.462,15 euros. La inversión que decidió hacer este año el Gobierno de Canarias en cada ciudadano es de 3.415,91 euros, 46,24 euros menos de la media de las autonomías comunes y 108,73 euros menor que el conjunto de todas las autonomías.

Canarias es la quinta región con menor gasto por ciudadano. A continuación, con ratios peores por orden decreciente, se encuentra Murcia (3.029,40 euros), Madrid (2.904,10 euros), Baleares (2.849,24 euros) y la Comunidad Valenciana (2.677,20 euros).

Las islas se encuentran lejos del gasto máximo de Navarra, que es de 6.447,27 euros, y 738 euros más del mínimo de la Comunidad Valenciana. La inversión por habitante en Navarra es un 188,7 por ciento más elevada que en el Archipiélago.

La comunidad foral Navarra tiene un gasto por habitante superior en un 82,90 por cien a la media del conjunto de las autonomías y la desviación al alza llega al 86,2 por cien cuando se le compara con la media de los territorios de régimen común. En Canarias, el gasto por isleño es un 3,1 por ciento inferior a la media de las 17 comunidades y un 1,3 por cien menos que la media de las 15 regiones comunes.

Extremadura es la segunda autonomía con mayor gasto, un 28,2 por ciento superior a la media de todas las comunidades, seguida de Castilla-La Mancha (19,4 por ciento) y La Rioja (12,8 por ciento). Las últimas posiciones las ocupan la Comunidad Valenciana, un 24 por ciento inferior al conjunto de las regiones, seguida de Baleares (19,2 por ciento inferior), Madrid (17,6 por ciento inferior), Murcia (14,1 por ciento inferior) y Canarias (3,1 por ciento inferior).

Andalucía y Asturias, con desviaciones del 1 por ciento y el 1,1 por ciento, respectivamente, son las que más se ajustan al gasto medio por habitante.

Según este estudio, los regímenes forales y las políticas de la Unión Europa (UE) explican parcialmente estos resultados. Pero agrega que tampoco es ajeno el diseño del sistema de financiación autonómica porque, al incluir criterios discrecionales para la asignación de los fondos, limita el cumplimiento de la equidad en la distribución territorial de la financiación para la prestación de los bienes y servicios transferidos.

Una de las principales reclamaciones del Gobierno de Canarias, en ese sentido, pasa por la actualización de los censos poblacionales, un criterio compartido desde el Gobierno estatal y la mayoría de los estudios técnicos existentes en la materia. El último dato dado por el Ejecutivo canario al Parlamento era que se perdían del orden de 500 millones de euros anuales al emplearse, como uno de los criterios de distribución de los fondos, el censo de habitantes de 1999.