el Precio del agua en el Valle de Aridane marcó un mínimo histórico en 2005

Actualizado: sábado, 7 enero 2006 13:00


Santa Cruz de La Palma, 7 Ene. (EUROPA PRESS) -

Según los datos que maneja el Consejo Insular de Aguas, organismo dependiente del Cabildo de La Palma, el período veraniego de 2005 fue el más barato que recuerdan los agricultores de la comarca oeste, si se tiene en cuenta el aumento del poder adquisitivo. El dato histórico situó la pipa de agua a 0,084 euros, 14 de las antiguas pesetas.

El coste del agua ha sido, desde tiempos remotos, una de las principales preocupaciones de los agricultores palmeros, principalmente en el Valle de Aridane, a la hora de calcular la rentabilidad de las producciones cultivadas. El cosechero sin agua en propiedad se ha visto obligado a comprar este recurso y a soportar, en épocas de falta de lluvias, precios que incluso llegaban a superar el dinero obtenido por la venta del producto, en el caso del sector platanero.

Sin embargo, durante el verano de 2005, como culminación de un proceso lento pero efectivo de mejora del sistema hidráulico y de una serie de factores que beneficiaron la obtención del recurso hídrico, el precio del agua marcó un mínimo histórico, el más bajo de la última década y, si se tiene en cuenta el aumento del poder adquisitivo a lo largo de los años, uno de los más reducidos de la historia de la isla.

Los datos del Consejo Insular de Aguas sitúan el precio del agua el pasado verano en 0,08 euros, 14 de las antiguas pesetas, lo que lo colocan como el verano más barato que recuerda el agricultor, en cuanto a la repercusión del precio sobre su cultivo. Además, el otoño del pasado año, con la llegada de las lluvias, se inició con precios a la baja.

Técnicos hidráulicos consultados recordaron que si nos remontáramos hasta hace 20 años, 14 pesetas sería como si hoy costase la pipa de agua unas 40 pesetas, aproximadamente. Durante la década de los 50 y finales de los 40, se llegó a vender agua a 5 pesetas la pipa, pero ese precio era superior al que se pagaba por un kilo de plátanos: el agua era muy cara.

El presidente del Consejo Insular de Aguas, José Luis Perestelo, tiene claro que se no puede achacar a una sola causa la obtención de estos precios el verano de 2005, "sino a la conjunción de estrategias, de carácter público y privado, que nos han permitido conseguir una considerable mejora en la explotación de un recurso básico para el sector agrario".

Perestelo afirmó que al acondicionamiento de infraestructuras "se ha sumado el correcto funcionamiento del Consorcio de Cuatro Caminos y de Dos Pinos, que han mejorado su gestión, lo que ha significado un ahorro importante de agua. La principal aportación privada a este hecho se encuentra en el esfuerzo que los propios agricultores han llevado a cabo para optimizar la gestión de sus aguas".

Por ello, el presidente entiende que "podemos afrontar el futuro hidráulico insular con tranquilidad y garantías", si bien todavía siguen sin aprovecharse la mayoría de las aguas de escorrentías. A lo anterior se une el aprovechamiento de la lluvia en los inviernos más húmedos, lo que permite el mantenimiento de las galerías con los caudales altos durante el verano, en una isla en la que más del 90 por ciento de las aguas son privadas.