SANTA CRUZ DE TENERIFE, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, ha presentado este miércoles el presupuesto de la Corporación municipal para el año 2021, que contará con 259,6 millones de euros, lo que supone una bajada del 8,3%, e incluirá una rebaja de la inversión de un 28%, hasta situarse en 41,6 millones de euros.
Acompañado por el concejal de Servicios Públicos, Guillermo Díaz Guerra; el concejal de Hacienda, Juan José Martínez, y la concejal de Promoción Económica, Evelyn Alonso, el alcalde indicó que se trata de un presupuesto condicionado por la pandemia que se caracteriza por priorizar el gasto social e intentar mantener el tejido productivo atendiendo a las pequeñas y medianas empresas (pymes).
José Manuel Bermúdez afirmó que las cifras económicas de Canarias son "poco optimistas" debido a la crisis provocada por la covid-19, con una caída del PIB del 20% y casi 50.000 empleos menos, por lo que "la situación de incertidumbre obliga a diseñar unos presupuestos capaces de asimilar la caída de los ingresos y realizar una contención del gasto para mantener, e incluso aumentar, el esfuerzo para atender a las personas y a las empresas en esta época de dificultades".
Respecto a los ingresos, Bermúdez recordó que Santa Cruz anunció hace unas semanas la puesta en marcha de una oficina que centralice los proyectos que serán presentados a las diferentes convocatorias que desde la Unión Europea o del Gobierno de España se destinen a la recuperación. A la espera de conocer la "letra pequeña" de cómo se hará el reparto de estos fondos, Santa Cruz ya se ha puesto de acuerdo con otros ayuntamientos del país para pedir al Gobierno un fondo de 4.000 millones de euros, a los que se sumarían otros 1.000 millones para transporte urbano.
El alcalde indicó que, a pesar de la poca información de que se dispone, las diferentes áreas ya están trabajando en la elaboración de una batería de proyectos que presentar para la captación de estos fondos, y la aspiración del Ayuntamiento está en llegar a unos 300 millones de euros.
Por su parte, el concejal de Hacienda, Juan José Martínez, reconoció el esfuerzo de todas las áreas del Ayuntamiento ante un escenario "inédito" y una caída "radical" de los ingresos, lo que ha obligado a diseñar un presupuesto en el que la prioridad inicial será "hacer más con menos".
Al igual que el alcalde, Juan José Martínez subrayó que el presupuesto del próximo año está muy condicionado por el entorno en el que se ha elaborado, donde la crisis de la covid-19 ha supuesto una caída del PIB sin precedentes, equivalente a un gran conflicto bélico como la Guerra Civil o una catástrofe natural.
El concejal de Servicios Públicos, Guillermo Díaz Guerra, incidió en que la situación económica, la incertidumbre y la política "errática" del Gobierno de España han dificultado la elaboración de unos presupuestos que el Partido Popular va a apoyar "sin fisuras" y que confía se puedan mejorar en los próximos años.
Mientras, la concejal de Promoción Económica, Evelyn Alonso, destacó que se trata de unos presupuestos que se ajustan a la realidad actual y donde todas las áreas han puesto el "corazón" para que sean unas cuentas "reales". Además, también deseó que en 2021 sean unos presupuestos "mucho más positivos" y que esto se quede en un "mal recuerdo".
PRIORIZAR EL GASTO SOCIAL.
El presupuesto de 2021 prioriza el gasto social y atiende a las pequeñas y medianas empresas, ajustando y conteniendo el gasto corriente, manteniendo un nivel de inversión que permita mantener los servicios públicos y reduciendo la presión fiscal para pequeños y medianos empresarios.
Respecto a la contención del gasto, se aplica una disminución en los capítulos de bienes y servicios, y personal, permitiendo afrontar el aumento del 0,9% de los salarios de los empleados públicos y congelando el de los concejales y personal eventual de la Corporación.
Se garantiza en este presupuesto todos los servicios públicos y se aumenta la aportación del IMAS un 7,5% (1,4 millones de euros más). El capítulo de inversiones decrece un 28%, para un total de 41,6 millones; sin embargo, se mantendrán por encima de la capacidad de ejecución del Ayuntamiento, que en 2020 será de unos 20 millones de euros.
Además, se incrementa el peso específico en el presupuesto de los Servicios Públicos Básicos (46,1%) y la Protección y Promoción social (15,35). Por tanto, las políticas orientadas a las personas suponen el 76,6% del presupuesto.
Por último, los ingresos corrientes bajan en torno a un 6,8%, fundamentalmente por la caída de los ingresos del IGIC, que se reducen más de un 30%, mientras que los ingresos propios se incrementan debido a la labor que realiza la Inspección Tributaria del Ayuntamiento, que ha hecho aflorar más deuda en los últimos años, lo que hace posible que esa presión fiscal más baja por la bonificación de algunas tasas se complemente con ingresos superiores.
