LOGROÑO, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los 916 socios y donantes de Intermón Oxfam en La Rioja, unidos a las ventas de comercio justo y las aportaciones institucionales, han permitido a esta entidad sortear, por ahora, la crisis, tal y como señaló hoy su coordinadora en La Rioja, Charo Zúñiga.
Intermón Oxfam en La Rioja celebró hoy una Jornada de Puertas Abierta dedicada a toda la sociedad pero, sobre todo, a sus socios y donantes. Hasta la tienda de comercio justo, ubicada en la calle Calvo Sotelo de Logroño, se desplazó el consejero de Presidencia, Emilio del Río.
El consejero tuvo la oportunidad de degustar el café que, entre otros productos, vende Intermón fruto del comercio justo (una alternativa de compra para las personas comprometidas con el desarrollo sostenible de las poblaciones del sur).
A la cita acudió, también, el responsable territorial de Rioja, Navarra y Baleares, Enrique Abad, quien presentó las cuentas de la organización y destacó que, "por ahora", a pesar del momento de crisis económica global, se han logrado "mantener" las cifras.
Abad subrayó la necesidad de que esta situación siga así en 2009, dado que si bajan las ventas Intermón deberá dejar de comprar productos al comercio justo, lo que perjudicaría a los países en vías de desarrollo que ven en él una salida.
El responsable de Intermón mostró temor hacia las cuentas que proyecte 2009. Sin embargo, a este respecto, Zúñiga señaló que también afrontaron con "miedo" la campaña de la pasada Navidad, pero salieron satisfechos "dentro de la coyuntura".
Estimó que las aportaciones de los socios y donantes alcanzan, en La Rioja, los 144.000 euros al año, a lo que habría que sumar las ventas en la tienda y las aportaciones institucionales.
En este sentido, el Gobierno riojano aportó que, desde el año 1995, el Ejecutivo regional ha destinado 28 millones de euros a cooperación y que, de este dinero, 679.796,17 euros se han destinado a financiar proyectos impulsados por Intermón.
La ONG impulsó, durante su último ejercicio, diecinueve proyectos, de los que catorce se centraron en dar respuesta a las víctimas de catástrofes como el terremoto en Perú y los incendios en Paraguay (agosto 2007), las tormentas tropicales en República Dominicana (finales de 2007), las inundaciones en Mozambique (principios de 2008) y la guerra en Darfur.
