LOGROÑO, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los artistas Gonzalo Ortigosa, Carlos Villoslada, César Ceniceros y Juancho Arregui, ha sido los ganadores de la muestra Estudio 120m, organizada por el Museo Würth. La propuesta ha contado con una gran participación, con 2.000 votos recogidos.
Además de los premios del público, y dada la calidad de las obras presentadas, el departamento curatorial del Museo Würth La Rioja (formado por la directora del Museo Silvia Lindner y por Carmen Palacios) junto con las coordinadoras de la actividad (Laura Peña e Iratxe Galíndez) han decidido otorgar un premio especial a la práctica artística al artista madrileño Juancho Arregui.
Su propuesta, a medio camino entre la arquitectura, la reflexión sobre el espacio público, la investigación plástica con nuevos materiales y el cuestionamiento del papel social del arte y los museos, refleja una de las aproximaciones más complejas a la práctica artística contemporánea.
Los cuatro compartirán espacio en el Museo la próxima primavera en una exposición colectiva que nos acercará a distintas manifestaciones artísticas de la práctica contemporánea, desde la abstracción geométrica de Gonzalo Ortigosa, la lírica orgánica de Carlos Villoslada, los retratos psicológicos de César Ceniceros y la investigación material volcada en propuesta espacial e intelectual de Juancho Arregui.
De entre más de 300 solicitudes recibidas se escogieron 100 obras que se pudieron visitar entre los días 12 de diciembre de 2013 y 12 de enero de 2014. Las obras formaban un gran mosaico colectivo en distintos espacios del museo, aprovechando las posibilidades de la arquitectura del edificio, que tanto permitían una vista cenital de la instalación como un acercamiento detallado desde los pasillos laterales de los grupos.
La entusiasta acogida de la propuesta por parte de artistas de todo el país requirió ampliar a algo más de 120m la superficie disponible para el proyecto. La exposición reunía obras de artistas de entre 20 y 86 años provenientes de lugares tan dispares como La Rioja, Barcelona, Cantabria, Castellón, Girona, Guadalajara, Huesca, Madrid, Murcia, Navarra, País Vasco, Sevilla, Soria, Teruel, Valencia o Zaragoza; incluso podrán observarse propuestas provenientes de Serbia y Alemania.
La exposición permitió un acercamiento a muchas de las tendencias artísticas más significativas del panorama contemporáneo, desde el Hiperrealismo hasta el Arte Conceptual pasando por obras con tintes oníricos y Surrealistas, obras asociadas a la persistente Abstracción Geométrica y al Op Art junto a otras de gran fuerza Expresionista o de refinada carga sociopolítica, y de disciplinas como la pintura, la escultura, la ilustración, la fotografía o el arte digital.
La obra Conclusión nº1, de Gonzalo Ortigosa, es la primera de una serie de 5 en las que reflexiona sobre la abstracción geométrica. Parte del plano irregular y de la reflexión teórica de Malevich, pero lo saca del lienzo como hiciera Oteiza. A diferencia del escultor vasco Ortigosa juega con los planos en plano, los tumba en lugar de elevarlos, crea una superficie bidimensional con múltiples posibilidades formales.
Carlos Villoslada es un habitual de la escena artística riojana emergente y cuenta por tanto con una larga lista de exposiciones tanto individuales. Ha sido ganador de varios premios y becas. Memoria II, tiene como origen la estancia en China (Song Zhuang) en el programa de residencia para artistas de la Galería Arteaga. El lenguaje de Carlos Villoslada está enraizado en lo natural, en lo orgánico; la naturaleza es la materia, el canal y el destino de su reflexión sobre la persona.
César Ceniceros es el artista con el recorrido más largo de los tres escogidos, y pertenece a varias asociaciones de fotografía. Si bien no se dedica profesionalmente a la fotografía tiene un largo recorrido como fotógrafo especializado en fotografía de estudio y especialmente a la realización de retratos. En sus fotografías, la luz le confiere una expresividad especial a las modelos, cargada de personalidad y de carga psicológica.
Juancho Arregui (Madrid 1972) es arquitecto por la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid en 2002 y licenciado en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid en 2013. Su obra es, en concreto, un vaciado en silicona de la entrada al museo Museo Thyssen-Bornemisza. Una reproducción cuya vinculación con el objeto original ya no es la réplica exacta de su forma, sino el aura que le otorga el lugar y que queda adherida a la silicona.
