La CGD abrirá una sucursal del Banco Simeón en Logroño a lo largo de este año

Actualizado: viernes, 5 mayo 2006 19:59

LISBOA, 5 May. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -

La Caixa Geral de Depósitos (CGD), a través de su filial española Banco Caixa Geral, va a invertir este año en España 2,94 millones de euros en la apertura de 13 nuevas sucursales, dentro del plan de expansión que está llevando a cabo, anunció hoy la entidad financiera, que también pretende duplicar el número de clientes del Banco Simeón, entre las que se encontrará una en Logroño.

La CGD explicó que la primera apertura será este mes en el centro de Madrid y dos en las localidades de Leganés y Getafe, a las que seguirán las de Pinto y Torrejón de Ardoz, todas ellas en la comunidad madrileña. Después vendrán Barcelona, Logroño, Pamplona, Vitoria, Zaragoza y Granada, con las que la entidad busca "expandir la red a las zonas más dinámicas de la economía española".

Con estas 13 nuevas oficinas la CGD contará a finales de 2006 con un total de 188 delegaciones en España, y habrá dado el primer paso para lograr el objetivo de crecer de forma orgánica y alcanzar las 300 sucursales en 2010, ya que según explicaron es la única forma de crecimiento posible en estos momentos.

"El mercado español no es en este momento muy favorable para una solución de crecimiento a través de adquisiciones, ya que aunque hay bancos a la venta no encajan en nuestro perfil", afirmó el presidente del Banco Caixa Geral, Faria de Oliveira.

Además de expandir su red de oficinas, la CGD también tiene entre sus planes duplicar el número de clientes del Banco Simeón, de los actuales 160.000 a los 330.000, y centralizar los servicios que actualmente están dispersos en tres locales en un único edificio en Madrid.

El plan de crecimiento anunciado el pasado octubre está sustentado por un aumento de capital de 250 millones de euros, y con él el BCG pretende alcanzar el equilibrio financiero en 2007 para, en 2010, lograr entre 60 y 70 millones de euros de beneficios. En 2005 la entidad registró unos resultados negativos de 30 millones de euros, aunque ya estaban previstos, y también cambió su modelo de gobierno en España, donde pasó a tener un administrador delegado español.