LOGROÑO, 27 May. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de La Rioja ha desestimado el recurso de un padre, que reclamaba la custodia de su hija, menor de edad, alegando para ello problemas mentales de la madre. De este modo, la Audiencia ratifica una sentencia anterior del Juzgado de Instrucción número 2 de Logroño, dictada en septiembre del año pasado.
En esta sentencia, de separación de la pareja, se otorgaba la custodia de la niña a la madre, "siendo la patria potestad compartida por ambos progenitores", al tiempo que establecía el régimen de visitas del padre para fines de semana alternos y para la mitad de las vacaciones y los puentes.
Este fallo fue recurrido por el padre, J.I.M., que planteó la "incongruencia" de la sentencia, que recuerda, entre otros hechos, que el hombre fue condenado en el año 2004 por un delito de maltrato familiar habitual. Con todo, el fallo apunta que cualquier medida que adopte el tribunal debe estar regida por su afección directa a las relaciones de los hijos con sus progenitores.
Recuerda la sentencia de la Audiencia Provincial que, en la sentencia recurrida, "ambos progenitores pretender obtener la custodia de la hija, nacida en 1999, que, desde la separación de hecho, ha convivido primero con su madre en Logroño y luego en Zaragoza.
El escrito apunta a la existencia de hasta tres informes psiquiátricos realizados durante el proceso, en dos de los cuales, si bien se señala un historial de tratamientos psicológicos recibidos por la madres, no se presenta ningún problema para mantener la custodia, ya que la menor no presenta ninguna alteración en su conducta.
En el tercero, sin embargo, se reclama un cambio en la custodia, atendiendo a un trastorno grave en la personalidad de la madre, que la Audiencia ve "insuficiente" para variar la custodia. El tribunal, por contra, no tiene en cuenta varios informes previos ordenados por el padre, ya que, en todos ellos, los expertos emitieron sus opiniones "basándose en los comentarios del recurrente", sin llegar a examinar a la madre.
Además, la Audiencia valora que, en este momento, con su residencia en Zaragoza, la niña cuenta con un entorno familiar -sus abuelos y su tío "que apoyan a la madre totalmente" en el cuidado de la menor-, social y escolar al que se encuentra "adaptada con normalidad".
A ello añade que "ninguna problemática se vislumbra siquiera en la niña, con las salvedades normales en todo caso de separación de los progenitores", lo que, por contra, a juicio del tribunal, podría llevar a ocurrir si se variase su custodia "ya que separarle de su madre, con la que siempre ha estado, podría originarle una situación traumática". Por ello, se desestima el recurso del padre y se confirma la custodia de la sentencia dictada en septiembre de 2005.
