LOGROÑO, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Fiscal solicita una pena de prisión de 18 meses para el acusado de un delito de tenencia de explosivos al detectar restos de explosivo en el garaje de su domicilio a través de los perros que utiliza para ello.
Según el escrito del Fiscal, al que tuvo acceso Europa Press, el acusado M.H.A.B -mayor de edad y con antecedentes penales ya rehabilitados- se encontraba trabajando en marzo de 2010 en una empresa de excavaciones haciendo el vertedero de basuras de Nájera. En dicha obra intervenía otra empresa que era la que se ocupaba de realizar las voladuras de tierra mediante el uso de dinamita.
Fue en ese periodo cuando el acusado se apoderó de 10 kg de dicha sustancia y de cable detonante. En un primer momento lo guardó en su garaje y posteriormente lo llevó a un corral propiedad de su abuela situado en Andosilla (Navarra).
A mediados de junio de 2010 el acusado tiró los explosivos al río Ega.
La Guardia Civil detectó restos de explosivo en el garaje del acusado a través de los perros y fue en ese momento cuando M.H.A.B confesó su acción guiando a los agentes al lugar donde había tirado el explosivo y ayudando a recuperar el cable y la dinamita no degradada por el agua.
Para el Fiscal estos hechos constituyen un delito de tenencia de explosivos en el que concurre la atenuante muy cualificada de reparación del daño, por lo que procede imponer al acusado una pena de 18 meses de prisión.
