LOGROÑO, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
Siete personas, seis hombres y una mujer de nacionalidad rumana, fueron detenidas el pasado jueves por pertenecer presuntamente a una organización criminal especializada en atracos a joyerías. La banda actuaba a nivel nacional, principalmente en el norte y centro de la Península, habiendo realizado al menos tres atracos en joyerías de Logroño, Leioa y Mieres. El valor total de lo sustraído supera los 900.000 euros.
Las investigaciones se iniciaron por parte de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de La Rioja, tras el atraco perpetrado en la joyería Coti de Logroño el pasado 25 de julio.
Tres días más tarde, el día 28, se produjo un robo de similares características en la localidad vizcaína de Leioa, determinándose que se trataba de los mismo autores. Tras ello se continuó con la investigación que llevó a la identificación de los cinco autores materiales, comprobando que habían regresado a Rumanía con los efectos robados.
NUEVOS ROBOS
A primeros del mes de septiembre la policía detectó que dos miembros de esta organización se encontraban en España realizando labores de información de nuevos objetivos, y de preparación de una nueva infraestructura en Salamanca. Posteriormente llegaron otros dos miembros, los cuales realizaron nuevas informaciones de joyerías de Valladolid, Palencia, Zamora, León, Cáceres, Ávila y Toledo.
El jefe de la banda fue localizado a mediados del mes de octubre en la capital salmantina, tras lo que los agentes sospecharon que se iba a producir un atraco casi con total seguridad antes de finalizar la semana en una joyería de Valladolid.
Como resultado de la operación se procedió a la detención de siete miembros, y se realizaron dos registros domiciliarios en inmuebles de Salamanca y Zalla (Vizcaya).
La policía se ha incautado de documentos de identidad falsos, numerosos documentos con informaciones y anotaciones de precios de joyas, tarjetas de joyerías, teléfonos móviles, múltiples tarjetas SIM de diferentes compañías, GPS, joyas, dinero en efectivo, además de ropa y atrezo utilizado por los autores para realizar sus hechos, así como una bolsa con bridas, cinta americana y un arma blanca
'MODUS OPERANDI'
El 'modus operandi' consistía en visitar las joyerías previamente con la intención de comprar joyas poniendo la excusa de pagar en varios plazos, lo que les permitía volver en otras ocasiones para ganarse la confianza de la empleada y mejorar su actuación.
Tres de los detenidos se encontraban en busca y captura por diferentes delitos, entre ellos robos con violencia, detención ilegal y lesiones, y uno de ellos tenía pendiente una detención e ingreso en prisión por unos hechos realizados en 2006 también por delitos graves.
