MADRID, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El 30 por ciento de las incidencias que se registren en el Metro de Madrid, tales como averían en las escaleras mecánicas o en las máquinas expendedoras de billetes, podrán subsanarse a través del nuevo centro de operaciones de Metro, sin necesidad de que tenga que desplazarse un técnico hasta el lugar de la avería, lo que ahorrará costes y tiempo.
Desde este nuevo puesto de mando, llamado Centro de Operaciones de Mantenimiento y Monitorización de Instalaciones y Comunicaciones (COMMIT), se controlan todos los equipos de las instalaciones, tanto los que dan servicios a las comunicaciones, como a los relacionados con la señalización, la energía o los equipos electromecánicos que Metro de Madrid posee a lo largo de toda la red, tales como escaleras mecánicas, ascensores, maquinas billeteras o torniquetes, entre otros.
El funcionamiento del sistema se realiza en dos fases. En la primera de ellas, se recibe una llamada de alerta sobre una incidencia, ya automáticamente, el personal que trabaja en el centro de control procedería a solventarla dando una serie de indicaciones al personal de control que se encuentra en la estación.
En el caso de que no fuese posible subsanar la incidencia directamente, el caso pasaría al 'segundo nivel', donde la persona que está en frente del control puede meterse dentro de la máquina donde se ha producido la avería y reparar el problema en tiempo real.
Echeverría explicó que este nuevo sistema de gestión de todo el mantenimiento de Metro hace viable resolver las incidencias en tiempo real, gracias a la monitorización remota. Así, se ha pasado de una media de 8,72 horas que se empleaban en la resolución de incidencias en estaciones, a una media de 4,87 en un gran número de sistemas de aquellas líneas en que está implantado, lo que redunda en un mejor servicio al usuario.
También se ha conseguido reducir el número de desplazamientos del personal hasta el lugar de la incidencia en un 5 por ciento, al poder resolverse desde el propio centro, y se espera que en un plazo de dos años llegue a disminuir hasta un 15 por ciento.
Este innovador sistema ha permitido que las incidencias que se producen en la mayoría de los sistemas de estaciones donde se ha implantado, se reduzcan en un 17 por ciento durante sus primeros 12 meses de funcionamiento -desde enero de 2008-, ya que la tecnología empleada genera alarmas que permiten prever cierto tipo de incidencias antes de que éstas ocurran. En 2011 podrán reducirse hasta un 25 por ciento.
Durante su visita al COMMIT, el consejero pudo comprobar que cuenta con una inmensa plataforma tecnológica en un espacio de más de 400 metros cuadrados en el que trabajan casi 100 personas las 24 horas del día para poder resolver cualquier incidencia que se produzca.
"El COMMIT supone una profunda transformación en la gestión del mantenimiento de Metro", explicó Echeverría. A través de una moderna e innovadora tecnología, además de poder controlar el correcto funcionamiento de los equipos, se consigue realizar la subsanación de determinados fallos desde el mismo COMMIT o, en caso contrario, que el equipo de mantenimiento que acuda a su subsanación puede conocer exactamente la causa del fallo, sin necesidad de verlo, por lo que su reparación será mucho más rápida y eficaz.
COBERTURA TOTAL EN EL 2011
Además, el sistema es capaz de ir aprendiendo a medida que se resuelvan las diferentes averías y alertas, de manera que poco a poco sea más experto en la gestión de incidencias y aporte de manera inteligente al usuario la solución más factible a cada problema.
Actualmente, el COMMIT supervisa el 30 por ciento de las estaciones de la red, lo que supone el 90 por ciento de las más modernas. La cobertura total se efectuará a finales del 2011 con una supervisión cercana al cien por cien de las estaciones de la red.
La inversión del COMMIT es de 30 millones de euros, por lo que es uno de los 37 proyectos más importantes de I+D+i que actualmente desarrolla Metro dirigidos a mejorar el servicio que la compañía ofrece a los más de 2,5 millones de viajeros que se desplazan diariamente por el suburbano.
