Aguirre:"No se puede aceptar que se llame proceso de paz a lo que es recuperación de la libertad y dignidad secuestrada"

Actualizado: viernes, 9 junio 2006 16:24

La presidenta entrega el Premio a la Tolerancia a Pilar Elías, viuda de Ramón Baglietto, asesinado por la banda terrorista ETA

MADRID, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, afirmó hoy que la paz es un ideal a conquistar, "pero nunca en la humillación, en el odio y en la exclusión", y agregó que la "paz sin libertad es la paz de las dictaduras". En este sentido, aludió a todas las personas que saben lo que es luchar cada día en el País Vasco por mantener sus propias ideas y defender su libertad, y dijo que "nunca podrán aceptar que se llame proceso de paz a lo que, de ser algo, tiene que ser simplemente la recuperación de la libertad y la dignidad secuestradas".

Aguirre entregó hoy en la Real Casa de Correos el Premio a la Tolerancia a Pilar Elías, la concejal del PP en la localidad de Azcoitia y viuda de Ramón Baglietto, asesinado en el año 1980 por Cándido Aspiazu, un etarra al que Baglietto salvó la vida cuando era pequeño, al impedir que le atropellase un camión cuando estaba en brazos de su madre y que, años después de matarle, ha abierto una cristalería en los bajos del edificio donde reside la edil.

Al acto asistieron el poeta cubano Raúl Rivero, también galardonado con el Premio a la Tolerancia; el presidente del PP en el Parlamento Europeo, Jaime Mayor Oreja; el europarlamentario Carlos Iturgáiz; la hermana de Miguel Ángel Blanco, Mari Mar Blanco; el secretario de Comunicación del PP, Gabriel Elorriaga; el secretario de Libertades Públicas, Ignacio Astarloa; el presidente del Foro de Ermua, Mikel Buesa; el presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz; el ex secretario general de UGT, Nicolás Redondo, entre otros.

La jefa del Ejecutivo autonómico elogió la actitud de Elías que, "constituye con su coraje y su grandeza moral el alegato más tremendo contra una sociedad que se ha acostumbrado a vivir en la abyección, que confraterniza con el crimen y que, llegado el caso, prefiere el mal al bien". "Una sociedad --continuó-- que hoy está envenenada por el odio y en la que se contempla con naturalidad la exclusión de los que no son nacionalistas".

Aguirre denunció la "perversión moral" que supone que el asesino tenga un negocio en los bajos del edificio en el que reside Elías y añadió que la edil "está dando día a día un ejemplo admirable de firmeza para defender sus ideas con limpieza, sencillez, con calma pero con vigor, con valentía y con un coraje que nos asombra a todos". En su opinión, el espíritu tolerante de Pilar constituye la piedra angular para la implantación de una convivencia plural y libre.

"UNOS MISERABLES Y COBARDES"

La presidenta regional también señaló que el ejemplo de Pilar Elías "es el mejor espejo para que todos los que viven en la infamia o en la complicidad con la infamia se miren en ella y se sientan como lo que son, unos miserables y unos cobardes". Así, incidió en que el caso "tremendo" de la edil vasca "se ha convertido en una bandera de dignidad ante la que nadie puede quedar indiferente".

"Una bandera que sirve para que muchos, desgraciadamente demasiados, den la medida de su catadura moral. Todos esos que viven pervertidos por el sectarismo y por el odio hacia quienes ejercen su libertad para pensar y expresar libremente ideas y convicciones que no coinciden con las del pensamiento único nacionalista", aseveró.

Raúl Rivero comparó la actitud de Elías con la resistencia de las Damas de Blanco de Cuba "que se enfrentan a la violencia y el terrorismo, esta vez del Estado, que tiene secuestrado a una nación", y expresó su solidaridad con la edil vasca por este premio, "con la certeza de que el abrazo de todos y estas manos tendidas le ayudarán a esperar trabajando con serenidad, sabiduría y tolerancia, la entrada definitiva de la justicia y la paz en su pueblo".

Por su parte, Mikel Buesa denunció que Aspiazu haya puesto una cristalería después de haber cumplido en la cárcel "una pena minimizada por unas leyes injustas con las víctimas del terrorismo" y elogió su actitud de "afrontar sin ningún temor la presencia cotidiana de quien no es más que un asesino excarcelado, aunque no arrepentido" y todo ello "sin un asomo de odio, sin una sola palabra fuera de tono y a la vez sin callar su condición de vasca y de luchadora por la libertad".

"AVISO" PARA ZAPATERO

Buesa subrayó que "el sufrimiento provocado por el terrorismo nacionalista vasco no puede quedar impune en virtud de algún oscuro acuerdo alcanzado entre ETA y el Gobierno" y por ello, advirtió al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "que para lograr el final del terrorismo no hay mayor error que el de conceder a los terroristas un papel de interlocución política".

Asimismo, amonestó a Zapatero por haber hecho "caso omiso" a lo que "las víctimas del terrorismo y la mayoría de los ciudadanos de España le venimos diciendo desde hace mucho tiempo, y mañana (con motivo de la manifestación convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo) le diremos una vez más: Al terrorismo hay que derrocarlo y que con ello nosotros tenemos que salir vencedores y los terroristas vencidos".

El acto lo cerró Pilar Elías, quien dijo encontrarse en medio de unas "circunstancias especiales" por la provocación del asesino de su esposo que, "lejos de mostrar un atisbo de arrepentimiento, me somete con su descarada presencia en los bajos de mi casa al permanente y doloroso recuerdo de unos hechos y que también las víctimas necesitamos reinsertarnos".

Elías afirmó que el premio recibido le infunde ánimo para no claudicar y sirve para hacer de contrapeso a "la pasividad y la cobardía de una parte de la sociedad vasca anestesiada por la violencia de los radicales, incluso muchas veces, en complicidad con ellos".

Asimismo, señaló que Madrid "es la capital nacional de los vascos y para una vasca de España, venir a Madrid es venir a su casa". "Venir a Madrid a un acto como éste es como acudir a la casa materna a reponer las fuerzas para mantenerme fuerte en esta lucha que nunca nos van a ganar", concluyó Elías en medio de una cerrada ovación.