El alcalde se compromete a no bajar los salarios a los trabajadores de la empresa municipal de limpiezas

Juan Soler,
EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 22 junio 2012 18:33

GETAFE, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Getafe, Juan Soler, se ha comprometido este viernes a no bajar los salarios a los trabajadores de la empresa municipal de limpiezas (LYMA) y a renovar 88 contratos que expiraban este mes, según ha anunciado la sección sindical de CCOO a través de un comunicado.

Al respecto, Juan Soler ha manifestado en el pleno municipal celebrado este viernes que ha estado reunido con todos los representantes sindicales de la empresa municipal de limpiezas y que se comprometido a mantener los puestos de trabajo y el poder adquisitivo.

Asimismo, ha indicado que se hará un plan de viabilidad "por el déficit que dejó en LYMA" el anterior equipo de Gobierno, "y que los sindicatos han entendido perfectamente, para sanear financieramente a la empresa". "Es una empresa pública de la que estoy satisfecho y que trabaja muy bien", ha apostillado.

La sección sindical de CCOO ha asegurado que de esta forma se zanja la polémica surgida tras la reunión celebrada el pasado 13 de junio cuando la dirección de LYMA trasladó a la representación sindical que, para reducir el déficit de 510.000 euros previstos para este ejercicio en la empresa, era necesario despedir a 88 personas con contratos temporales o rebajar un 10 por ciento el sueldo a toda la plantilla.

"No obstante, el alcalde ha conminado a los sindicatos a proseguir las negociaciones para salir de la difícil situación financiera por la que atraviesa la empresa", han subrayado.

Sin embargo, CCOO considera que la situación financiera de la empresa se ha visto agravada "por el despilfarro de la actual dirección que, en un momento de crisis, y a sabiendas del ajustado presupuesto de LYMA, ha incrementado en un 21 por ciento los cargos directivos con un sobrecoste de 600.000 euros al año".

Además, desde el sindicato se han felicitado por las palabras del alcalde comprometiéndose a renovar los contratos y no reducir los sueldos de la plantilla, por lo que "demuestra una vez más su cintura y su talla política al zanjar, de momento, una cuestión que no iba sino a deteriorar la imagen de su Gobierno".