Alertan de que menores extranjeros roban a la salida de bancos y en cajeros de Tirso de Molina y Príncipe de Vergara

Actualizado: miércoles, 6 febrero 2008 20:40

MADRID, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la asociación del distrito Centro, Francisco García, alertó hoy de la presencia de una banda de menores extranjeros dedicados a robar a personas, generalmente mayores, a la salida de las entidades bancarias situadas en la plaza Tirso de Molina y en los cajeros automáticos de la calle Duquesa de Alba.

En declaraciones a Europa Press, García indicó que el 'modus operandi' de este grupo de seis o siete componentes, con edades comprendidas entre 10 y 15 años de origen magrebí, consiste en vigilar los movimientos previos de los usuarios de los bancos. A la salida, les siguen y, en un momento dado, cuando la víctima se descuida, se lanzan en tropel, le arrebatan el bolso y salen corriendo.

Concretamente, apuntó que ayer por la tarde, a las 15.20 horas, el grupo intentó robar a una mujer a la salida de una entidad del BBVA de la plaza de Tirso de Molina. Los gritos que profirió la atracada alertaron a un agente de la Policía que patrullaba en la plaza de Lavapiés, por lo que los pequeños cacos huyeron sin el botín.

"Además, abren coches y roban lo que tengan. Incluso ya se ven coches con carteles 'Soy del barrio y no hay nada dentro'", agregó el representante vecinal, que comparó a este grupo con los 'niños del pegamento', menores magrebíes que hace unos años atacaban a los viandantes después de esnifar esa sustancia.

ROBOS BAJO EL MÉTODO 'FAROLA'

En otro punto de Madrid, concretamente en la calle Príncipe de Vergara, cerca de la Plaza de la República Argentina esquina Colombia, se sucede el mismo episodio en los últimos meses, aunque los ladrones utilizan otro proceder para atracar a los usuarios de un cajero bancario.

Concretamente, según informaron a Europa Press vecinos de este barrio, un grupo de dos o tres niñas rumanas de unos 15 años que aparentemente se dedican a pedir firmas para una asociación de minusválidos se acercan a los usuarios del cajero automático en el momento justo en el que éstos sacan dinero. Entonces, una persona interpela en lenguaje ininteligible a la víctima que firme en un papel y le coge la mano, mientras que otro de los miembros coloca el periódico La Farola encima del teclado digital del cajero.

Inmediatamente después, las adolescentes salen corriendo. Por lo general, las víctimas piensan que han conseguido evitar el atraco, ya que conservan su cartera y su bolso. La sorpresa llega cuando comprueban que acaban de desaparer 300 euros de su cuenta bancaria. En realidad, mientras los asaltados intentaban quitarse de en medio a la niña que les agarraba el brazo, la otra chica metía su mano por debajo del periódico y pulsaba la tecla de 300 euros, llevándose al instante el dinero en metálico, sin que, por lo general, el usuario lo perciba.

El portavoz de la asociación de Vecinos del distrito Centro considera que este tipo de delitos son conocidos por la Policía Municipal, "aunque nada puede hacer por controlarlo porque, al ser menores, no puede detenerlos". Por ese motivo, piden que las distintas Administraciones se impliquen para acabar con la impunidad de estos pequeños delincuentes.