MADRID, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, admitió hoy que el proceso de identificación con ADN de los cuerpos de las víctimas mortales del accidente aéreo que permanecen en el Cementerio de La Almudena avanza "con más dificultades de las que los especialistas preveían inicialmente", pero se mostró confiado en que a partir de hoy adquieran "más ritmo".
En declaraciones a los medios tras visitar a un niño herido en el accidente que permanece ingresado en el Hospital Niño Jesús, Rubalcaba no quiso dar datos exactos sobre las identificaciones realizadas por este método, ni plazos concretos sobre cuándo finalizará el proceso e insistió en que el método del ADN es mucho más complejo que el de las huellas dactilares y "lleva su tiempo".
Según explicó, ayer se llevaron a cabo dos identificaciones por este método, la pasada noche otras cuatro y durante el día de hoy ya se ha hecho "alguna más". No obstante, el ministro se mostró confiado en que el proceso coja hoy "más ritmo" y se vaya avanzando, aunque recalcó que habrá algunos casos, como el de un niño adoptado o personas extranjeras, que serán "más complicados de hacer".
Debido a estas dificultades que se están encontrando, el ministro explicó que se ha decidido informar a los familiares de las víctimas sobre el proceso, en una reunión que comenzó a mediodía en el Hotel Auditorium y en la que está el comandante jefe del servicio de identificaciones de la Guardia Civil.
"Está costando más de lo que inicialmente pensamos y por eso hemos decidido dar una explicación pormenorizada a las víctimas de cómo lo estamos haciendo, de cuáles son los procesos biológicos que hay que hacer y de las dificultades con las que nos estamos encontrando", indicó.
CELERIDAD Y SEGURIDAD EN EL PROCESO
En cualquier caso, el titular de Interior recalcó que hay "dos principios" que se van a respetar en el proceso, el de la celeridad y el de la seguridad. "Cuanto antes mejor, sin duda, pero tenemos que estar seguros de que lo que decimos a las familias es la verdad", subrayó.
Tras visitar ayer los hospitales de La Paz y Ramón y Cajal, Rubalcaba acudió esta mañana al Niño Jesús, donde se encuentra el pequeño Alfredo Jesús Acosta, de ocho años, con heridas de carácter leve.
El ministro destacó que es un niño "muy activo" y de "muy buena conversación", que le ha estado hablando "de sus cuentos y de las cosas que hace". Rubalcaba explicó que el niño "va a salir adelante sin ninguna duda", aunque reconoció que, durante la visita, no se ha podido "quitar de la cabeza lo que ha pasado".
El pequeño perdió a su padre en el siniestro y su madre permanece ingresada en la UCI del Hospital Ramón y Cajal, con un traumatismo craneoencefálico severo y diversas heridas, en estado "muy grave". Rubalcaba se mostró "gratamente impresionado de la calidad personal y profesional" del personal que está atendiendo al niño.
