MADRID, 28 May. (EUROPA PRESS) -
La ONCE ha arrancado este jueves con la impresión de los primeros cupones tras el confinamiento, provocado por la crisis del coronavirus, para preparar la vuelta de los vendedores a las calles el 15 de junio, tras tres meses sin sorteos.
En concreto, han comenzado con los primeros 5,5 millones de cupones, que deberán estar listos para que el próximo 15 de junio los 19.000 vendedores puedan reanudar su actividad. Unas 2.000 solo en la Comunidad de Madrid.
En el acto de arranque de la impresión, en el Centro Logístico y de Producción de la ONCE, ha participado la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, acompañado con el director general de la ONCE, Ángel Sánchez Cánovas. La fábrica está ubicada en un polígono industrial del madrileño barrio de Vallecas y en ella trabajan 100 personas.
Durante su visita, la dirigente regional, ha recalcado su "interés en que la región recupere cuanto antes la normalidad de su actividad económica, para reactivar la Comunidad de Madrid y seguir siendo el motor de España".
Los nuevos cupones llevarán como mensaje 'Volvemos... los iguales'. Una vez que se proceda a la impresión, el preparado y el empaquetamiento, los cupones se distribuyen mediante una operación logística por todos los rincones de la geografía.
TRAZABILIDAD DEL CUPÓN
Según han explicado desde la ONCE, una vez que los cupones han sido dibujados y el equipo de diseño ha establecido cada uno de los cupones de cada día, estos entran en la zona de fotomecánica, donde se procesan los millones de bits que componen las imágenes que llegan al prisma láser que, girando a 45.000 rpm, formará la imagen de las 'offset' a introducir después en las rotativas.
Dos grandes rotativas arrancan con sus más de 170 rodillos, millares de engranajes, correas y árboles de transmisión, todos conjuntados para imprimir 300 kilómetros de banda de papel con 200 kg de tinta (papel respetuoso con el medio ambiente procedente de bosques certificados y tintas base agua o sin alcohol), cumpliendo así todas las medidas de responsabilidad.
De ahí, las bobinas, ya impresas, pasan a seis líneas de acabado, que las convertirán en 'topes' o paquetes asignados a los vendedores de la ONCE y puntos de venta autorizados. Cada línea de acabado se alarga 25 metros de longitud y se compone de diversas maquinas alemanas, suizas, italianas y japonesas, que hablan un idioma común para trabajar juntas.
En este proceso será cuando la banda de papel se revise, inspeccionando que cada código y número impreso en el cupón concuerda con el complejo fichero de numeración, analizando cerca de 2.500 dígitos por segundo.
Ya solo quedaría que las cuchillas de la cortadora seccionen la banda de papel con suma precisión cada 20 cupones, enviando cada pliego cortado al acumulador hasta componer el paquete o tope correspondiente a un vendedor. Revisiones finales y a formar parte, junto con otros, de los paquetes que recorren España para llegar a cada vendedor y, de su mano, a cada cliente.
