Las acusaciones populares piden de cuatro a seis años de cárcel para cuatro mandos policiales por falsificar un informe sobre el 11-M
MADRID, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Secció Decimoquinta Audiencia Provincial de Madrid comenzará a juzgar el próximo martes a cuatro altos mandos policiales, entre elllos al comisario general de la Policía Científica, Miguel Ángel Santano, por el denominado "caso del ácido bórico", en el que se solicitan para él y el resto de procesados entre cuatro y seis años de prisión por la presunta falsificación de un informe que relacionaba el hallazgo de la citada sustancia en el domicilio de un acusado del 11-M con la organización terrorista ETA.
La Fiscalía y la Abogacía del Estado no presentan acusación, por lo que la petición de penas de cárcel procede tan sólo de las acusaciones populares, representadas por la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M y el sindicato Manos Limpias.
El pasado mes de junio, la Audiencia Nacional resolvió que sea en el trámite de cuestiones previas a la vista en sí cuando las partes alegen lo que consideren oportuno sobre la denominada "doctrina Botín" establecida por el Tribunal Supremo, que impide la apertura de un juicio cuando la única parate que acuse sea la acción popular.
El Supremo confirmó recientemente el archivo por parte de la Audiencia Nacional, por este mismo motivo, del caso "cesiones de crédito", en el que se iba a juzgar, entre otros, al presidente del Grupo Santander, Emilio Botín. Sin embargo, el alto tribunal no aplicó la doctrina al denominado "caso Atutxa", en el que el ex presidente del Gobierno Vasco ha sido condenado en un procedimiento cuya única acusación la ejercía el Sindicato Manos Limpias.
Santano, junto con el secretario general de esta comisaría, Pedro Luis Mélida; el jefe de la Unidad de Análisis, José Andradas; y el jefe de la Sección de esta unidad, Francisco Ramírez; están acusados de tres delitos de falsedad documental, falso testimonio y encubrimiento por falsificar presuntamente un informe que relacionaba el hallazgo de ácido bórico en el domicilio del procesado por el 11-M Hassan el Haski con la organización terrorista ETA.
Según el auto de apertura de juicio oral dictado por la juez instructora de Madrid Gemma Gallego, de las declaraciones prestadas tanto por los peritos que realizaron el informe como por sus superiores se deduce que existen "diferentes indicios" de la participación de los últimos en la "manipulación material" del documento, siguiendo sus "indicaciones y con su conocimiento".
Por ello, estimó que existían indicios de conducta constitutiva de un delito de falsedad documental y falso testimonio. En el caso de Santano, la juez entiendió además que también podría existir un delito de encubrimiento.
