El acusado afronta una petición fiscal de 33 años de cárcel
MADRID, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Madrid juzgará hoy a un presunto maltratador que dejó a su ex mujer tetrapléjica por la brutal paliza que le asestó el 28 de junio de 2006 en el domicilio familiar, incumpliendo una orden de alejamiento. El supuesto agresor irrumpió en la habitación de la víctima armado con un cuchillo para acabar con su vida, aunque una de sus hijas consiguió arrebatarle el arma.
José Luis R.G. se enfrenta a una petición fiscal de 33 años de prisión por un delito de violencia doméstica, asesinato en grado de tentativa, lesiones, maltrato en el ámbito familiar, quebrantamiento de condena y allanamiento de morada.
En el escrito de acusación, el fiscal relata que el acusado sometía a su mujer, Antonia R.L., a "un trato degradante y humillante", menospreciándola "como persona y como mujer". Se refería a ella, según el Ministerio Público, "con expresiones peyorativas, tanto en su vida privada como en su entorno social, así como fundamentalmente en presencia de sus hijos".
La situación se agravó de "forma radical" cuando Antonia R.L. le anunció en 2005 su intención de separarse. El calvario que vivía la mujer le llevó a formular una denuncia contra su marido por continuas amenazas.
ORDEN DE PROTECCIÓN
El Juzgado de Instrucción número 32 de Madrid acordó una orden de protección el 9 de septiembre, prohibiendo al supuesto maltratador aproximarse a menos de 500 metros de su esposa y comunicarse con ella. El magistrado adjudicó a la víctima la vivienda familiar y la custodia de los dos hijos comunes, al igual que hizo el juez que se ocupó de la demanda de divorcio.
El Juzgado de lo Penal número 18 de Madrid condenó a José Luis R.G. a un año de cárcel por la denuncia presentada por su esposa. La sentencia consideró probado que el hombre utilizó expresiones para amedrentar a su víctima sobre su anunció de separación, tales como "antes te mato", "te divorciarás con los pies por delante" o "Tú verás, te recomiendo que no sigas adelante. Tú sabes que esto es un suicidio".
Según el fiscal, el procesado desobedeció en varias ocasiones la orden de alejamiento. Una de las veces, entró en la vivienda con la intención de golpear a su mujer. En otra ocasión, llegó a ser detenido al incumplir la medida de alejamiento.
PALIZA BRUTAL
En su línea de incumplir la orden de alejamiento, José Luis R.G. acudió el 28 de junio de 2006 a su antigua vivienda, "utilizando sus propias llaves, así con un plástico con el que levantó el pestillo de seguridad". Aprovechando que su ex mujer e hijos dormían, se dirigió a la habitación de su ex esposa armado con un cuchillo.
"Con el compromiso deliberado de causarle a la víctima el mayor sufrimiento posible, José Luis R.G. agarró por el cuello a su ex esposa, la sacó de la cama, la arrojó al suelo y empezó a darle puñetazos y pisotones en el cuello", narra el fiscal. Alertada por los gritos, la hija acudió a la habitación y en un momento de descuido logró quitarle el cuchillo.
"Para entonces la mujer sangraba por la boca y mostraba claros síntomas de asfixia", agrega el fiscal, "algo que no evitó que siguiera golpeándola mientras se dirigía a sus hijos con expresiones del tipo 'la tengo que matar por todo lo que nos ha hecho'. Al observar que estaba inerte en el suelo, abandonó el domicilio".
A consecuencia de la paliza, la víctima ingresó en el Hospital Gregorio Marañón con fracturas de varias vértebras, pérdida de alineación de los cuerpos cervicales, hematoma en región cervical anterior en partes blandas y hematoma mediastínico anterior como probable extensión del hematoma cervical.
Se la derivó el 18 de julio al Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo debido a un síndrome de lesión medular, traumatismo cervical y traqueal por síndrome de distrés respiratorio, así como distintos trastornos derivados de una parálisis extrema que le impide cualquier movimiento.
