El Ayuntamiento modifica el proyecto de Vallehermoso tras quedar desierto el concurso de licitación de la obra

Actualizado: domingo, 21 febrero 2010 14:05

Pretende reducir casi a la mitad el presupuesto eliminando una de las plantas de aparcamiento y reduciendo la edificabilidad de oficinas

Otra opción es ejecutar la obra por fases en tres años, comenzando por el polideportivo y la pista de atletismo que estarían en 18 meses

MADRID, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Madrid está modificando el proyecto de reforma del estadio de Vallehermoso, en el distrito de Chamberí, tras quedar desierto el concurso de licitación de las obras, y con el objetivo de reducir aproximadamente a la mitad el presupuesto de esta iniciativa mediante la eliminación de una planta del aparcamiento y la reducción de la edificabilidad del edificio de oficinas previsto en la zona.

Según explicó esta semana el delegado de Hacienda, Juan Bravo, durante la comisión ordinaria del ramo, la licitación de la obra finalizó el pasado 6 de noviembre, "no habiéndose presentado ninguna proposición de oferta al mismo, por lo que se ha procedido a declarar desierto el proceso de adjudicación del contrato de concesión de obra pública para construir y explotar el centro deportivo".

Así, reconoció que en este momento el movimiento de tierras en la parcela "ya se ha realizado, para agilizar la obra", por lo que "ante la falta de ofertas el estudio de Cano Lasso, que realizó el proyecto, está modificándolo con la colaboración del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) para reducir sus costes globales".

En declaraciones a Europa Press, Bravo aclaró que el objetivo es "mantener los mismos servicios reduciendo el coste" a unos 55 millones de euros desde los 112 millones en que se licitó. Esto se está haciendo reduciendo en una planta el aparcamiento previsto, modificando el edificio de oficinas y reduciendo asimismo su edificabilidad.

Así, "en las próximas semanas se planteará la posibilidad de volver a sacarlo en régimen de concesión por un importe sustancialmente inferior, o abordar la ejecución del polideportivo, la pista de atletismo y la comisaría directamente nosotros por fases en tres años, dejando el aparcamiento y el edificio de oficinas para una segunda etapa". Todo esto se haría "con cargo al presupuesto para, en unos 18 meses aproximadamente, poner la infraestructura en marcha".

CULPA DE LOS BANCOS

En cuanto a las razones por las que este concurso ha quedado desierto, el delegado indicó que la información de las potenciales empresas adjudicatarias señala a "las entidades financieras" como culpables de la actual situación.

"Dado el sistema de concesión aquí, como en otras muchas adjudicaciones en marcha, se están quedando desiertas porque las empresas no obtienen la financiación necesaria para poder ejecutar los proyectos. Así, esto obliga a aparcar el sistema de concesión por uno alternativo a la ejecución de obra pública", apostilló el concejal.

Además, justificó este sistema de concesión de obra pública alegando que realizar directamente este tipo de proyectos obliga a "inmovilizar mucho dinero en un equipamiento cuando no es lo más prioritario en momentos de dificultades económicas".

"El sistema concesional permite abordar la obra, que esté al servicio de los ciudadanos en 18-20 meses según el plazo previsto, y no inmovilizar ese dinero, sino hacer una aportación en forma de canon y dar la explotación del aparcamiento y el edificio de oficinas para que, con un millón aproximadamente al año, los ciudadanos pudieran disfrutar del servicio", explicó.

Sin embargo, la realidad ha sido diferente y, tal y como señaló el concejal de IU Daniel Morcillo, "el problema es que a esta situación se llega por el modelo de construcción de equipamientos públicos por el que ha optado" el Gobierno municipal que, aun siendo "plenamente legal, de facto pone en manos del mercado la construcción de equipamientos".

"Y ocurre que las empresas no ven rentabilidad económica en este tipo de equipamientos y no concursan. No le quiero dar ideas de cómo podría ser rentable para las empresas este tipo de equipamientos, porque nosotros defendemos su segunda opción: el modelo donde los ayuntamientos construyen los equipamientos necesarios para los vecinos y se hacen cargo de su explotación", continuó el edil.

A su juicio, ésa es "la única manera de garantizar que no hay intereses económicos en la gestión de los derechos de los vecinos", por lo que concluyó que, dado que "la rentabilidad social debería estar por encima de la económica, a esta situación se llega por el modelo (del PP)".

EL PROYECTO

En mayo de 2008, el Ayuntamiento de Madrid aprobó el Plan Especial para modificar las instalaciones deportivas de Vallehermoso, construidas en 1960. Así, tras el concurso de ideas del año anterior se había elegido un proyecto para los 42.544 metros cuadrados de parcela y 15.116 metros cuadrados de viario público afectados.

En concreto, se preveía el mantenimiento de más de 5.000 metros cuadrados de zonas verdes con equipamientos infantiles, la construcción de un aparcamiento subterráneo de dos plantas con 400 plazas para residentes y rotacional (el mes de junio pasado pasaron a ser 800 plazas), y la reserva de una zona de 36.918 metros cuadrados para una pista de atletismo de alto nivel de 400 metros de cuerda con ocho calles y capacidad para unos 10.000 espectadores.

En el mismo espacio debía hacerse un campo interior que cumpliría los requisitos para los concursos de saltos y lanzamientos, así como los espacios necesarios para su buen funcionamiento: zona de calentamiento, zonas diferenciadas para deportistas, autoridades, medios de comunicación y público; vestuarios, almacenes técnicos y equipos para retransmisiones deportivas.

Asimismo, también se debía levantar un polideportivo municipal con 1.500 plazas para cubrir la demanda del barrio y dar apoyo a la pista de atletismo, con pabellón cubierto polivalente con pista subdivisible en tres espacios con cortinas separadoras para baloncesto, balonmano, fútbol-sala, etcétera, con una capacidad para mil espectadores.

Junto a él, se debía levantar una zona de usos asociados y complementarios al deporte que comprendería varias unidades cubiertas, entre ellas una sala para esgrima y otras dos para gimnasio, aerobic y pilates.

El Plan también incluía una piscina de 50 metros con muro móvil y capacidad para 300 espectadores, zona acuática con tres vasos --wellness, spa, fisioterapia, hidroterapia...--, un vaso de aprendizaje, otras unidades al aire libre, espacios auxiliares para deportistas, público y servicios técnicos; un parque urbano, solarium, servicios de hostelería y zonas de aparcamiento; así como modificar la configuración de la calle Juan Vigón para convertirla en una calle-parque, que funcionara como un gran 'salón urbano' de acceso al estadio.

Además, también existirá un edificio-torre de doce plantas para albergar las oficinas municipales deportivas, una librería deportiva, un centro médico especializado, guardería, clubes deportivos, aulas y un emplazamiento especial para el Club de Armas de Madrid. Finalmente se añadió al proyecto una comisaría de policía de unos mil metros cuadrados.

La concesión de la obra pública prevista era de 40 años, durante los que el Ayuntamiento destinaría 1,5 millones de aportación máxima anual en el periodo de explotación. A mediados de octubre de 2008 se inició el derribo de la vieja estructura, que contaba con una pista de atletismo de seis calles, un pabellón cubierto, un frontón, un mini-frontón, una piscina de verano, diversas pistas y campos al aire libre.