Racismo expresado en forma de leyes como la de Extranjería o con la modificación del Código Penal que convierte en delito la manta
MADRID, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
El delegado de Salud, Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de madrid, Javier Barbero, ha defendido que "la muerte social es predisponente de la muerte biológica", con el fallecimiento del ciudadano senegalés Mmame Mbaye como telón de fondo, y ha asegurado que el Gobierno municipal seguirá trabajando en "la lucha contra las actitudes xenófobas y contra el racismo institucional, que emana de leyes como la de Extranjería".
Barbero ha declarado en la comisión del ramo que el Ejecutivo seguirá apoyando a los vecinos con o sin papeles porque todos tienen derechos y ha instado al PP, que ha llevado la muerte de Mbaye a la Casa de Cisneros, a que "dejen de hacer caja electoral". "Dejen de traficar con el daño de los demás", ha lanzado.
El delegado ha comenzado su comparecencia poniendo el centro en "la precariedad vital de tantas personas que huyen de sus países para sobrevivir" y en "cómo determinadas normas les condenan a ser unos auténticos nadie". Es el mismo sistema que permitió que Mmame Mbaye "estuviera catorce años sin papeles, con el pánico metido en el cuerpo por si podía ser detenido, llevado al CIE y expulsado del país".
Todas estas circunstancias "afectan a la evolución de cualquier cardiopatía", igual que la exclusión social, "como está estudiando científicamente". "Mbaye vivía desde la supervivencia. La muerte social es predisponente de la muerte biológica", ha apuntado haciendo mención a un estudio de la Universidad Pompeu Fabra.
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