Bomberos suben 33 plantas de Torre Espacio cargados con 25 kilos de equipo en la III Carrera Vertical de Madrid

Actualizado: sábado, 19 septiembre 2009 19:51

MADRID, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -

Un gran número de bomberos participaron hoy en la III Carrera Vertical de Madrid, en la que cargados con el equipo completo de salvamento --25 kilogramos de peso-- subieron las 33 plantas de la Torre Espacio de Madrid, con sus 1.000 escalones y con la máscara de oxigeno incluida.

La III Carrera Vertical Torre Espacio constó de dos pruebas. En la primera, 120 bomberos venidos de toda España ascendieron hasta la planta 33 del edificio Torre Espacio con el equipo completo de intervención. En la segunda, 150 bomberos y otros 150 atletas populares subieron más de 1.300 escalones hasta la planta 55 de la Torre.

El atleta olímpico y doble campeón de España de 1.500 metros Arturo Casado consiguió igualar el tiempo empleado por el mejor bombero, el madrileño Patrick Sánchez Nato, recientemente proclamado Campeón en la especialidad de Carrera Vertical de las Olimpiadas de Policías y Bomberos celebradas el pasado mes de agosto en Vancouver. El tiempo realizado por ambos mejoró en 17 segundos el anterior récord de la prueba.

"Es un esfuerzo muy grande, es una preparación por si un día hay un incendio en una torre", aseguró el médico de Bomberos, Ángel Zurbano, una vez comenzó la tercera edición de la carrera vertical en Madrid. No obstante, los bomberos participantes explicaron que el esfuerzo en esta competición es mayor, ya que en caso de encontrarse con una situación real, tendrían que tener aire suficiente como para cumplir con su cometido.

"Es una prueba que para la profesión de bombero es la ideal, lo que pasa es que la intensidad en servicio no es la misma porque en teoría arriba hay fuego y hay que llegar un poquito fresco para apagarlo", comentó Raúl, que iba a comenzar su participación.

"Hay que entrenar un poquito de vez en cuando para mantenerse y el día de la carrera te aceleras más y subes más deprisa, por eso llegamos muertos", reiteró Menardo, el primer corredor en participar, visiblemente cansado.

Este bombero destacó que, mientras va subiendo escaleras, sólo se tiene la mente en dos cosas: terminar, "porque el tiempo pasa muy despacio", y el ascensor. "Experimentas una sensación de mucho cansancio, pero cuando bajas en el ascensor ya estás pensando en la próxima carrera, es una pequeña droga que tenemos los bomberos", concluyó Raúl.