MADRID, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de 27.000 niñas madrileñas que cumplirán 14 años durante 2008 se vacunarán contra el Virus del Papiloma Humano (VPH), el cáncer de cuello de útero (el segundo tumor maligno que más afecta a las mujeres), según la convocatoria del concurso publicado en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM).
En principio, está previsto que a partir del segundo semestre de este año se comience a vacunar a las niñas que recibirán tres dosis, según la pauta de vacunación indicada. La vacuna, que protegerá frente a la infección de VPH que en algunos casos puede derivar en cáncer de cuello de útero, es efectiva antes del comienzo de relaciones sexuales. De ahí que los expertos aconsejen su administración en la edad infanto-juvenil.
La Consejería de Sanidad adjudicará mediante concurso público la adquisición de 89.723 dosis de la vacuna contra el VPH, con una inversión prevista de 9.331.192 euros. Además, se prevé que a principios del mes de abril se formalice la adjudicación a uno de los dos laboratorios que actualmente comercializan la vacuna (Glaxo y SanofiPasteur).
El virus del papiloma humano representa una de las infecciones de transmisión sexual más frecuentes y se conocen más de cien tipos diferentes. Aproximadamente, el 70 por ciento de los casos de cáncer de cuello uterino en el mundo son producidos por dos tipos del Virus (tipos 16 ó 18), que son los que contiene la vacuna.
Recientemente, se han comercializado dos vacunas que contienen, al menos, los dos tipos de alto riesgo. Los ensayos clínicos han dado unos resultados muy satisfactorios lo que ha llevado a que muchos países y la Organización Mundial de la Salud las recomienden.
400 CASOS AL AÑO EN LA REGIÓN
Aproximadamente, en la Comunidad de Madrid se registran al año 400 casos de cáncer de cuello de útero. Unas 60 mujeres residentes en la región fallecen por cáncer de cuello de útero, lo que representa el 1,5 por ciento de toda la mortalidad por tumores malignos.
La incidencia del cáncer asociado al VPH ha ido descendiendo en los últimos años gracias al aumento de las mujeres que se someten a las pruebas de cribado o revisiones ginecológicas con citologías, situándose actualmente en un 92,7 por ciento de mujeres entre 34 a 64 años.
