Cobo califica de "tercermundista" la imagen de los 'hombres-anuncio' en el centro de la ciudad

Actualizado: martes, 14 octubre 2008 22:35

MADRID, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -

El vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, consideró hoy "tercermundista" la imagen que dan los 'hombres-anuncio' en el centro de la capital, y aseguró que el Gobierno local "no considera indignas a las personas, sino a los trabajos", de ahí que haya decidido prohibirlos en la última Ordenanza de Publicidad Exterior, presentada por el primer edil, Alberto Ruiz-Gallardón, y la delegada de Medio Ambiente, Ana Botella, el pasado jueves.

"Lo que hacemos con esta ordenanza es regular la forma en que se hace la publicidad, porque los 'hombres-anuncio' de las tiendas de oro y demás no son como los futbolistas, que no pasan todas esas horas paseando por la calle arriba y abajo cargados con un cartelón", explicó Cobo en declaraciones a la SER recogidas por Europa Press.

Según él, las compañías que recurren a estos métodos publicitarios tienen "muchísimos otros mecanismos a su disposición". "Sin embargo, tienen a personas, casi siempre inmigrantes y muchas veces sin papeles, llevando esa publicidad, y no nos gusta que se les obligue a eso", apostilló el portavoz del Ejecutivo municipal.

"Nos parece tercermundista, porque tenemos canales publicitarios que estas empresas podrían usar, y es contra ellos contra quienes va esta norma", concluyó, a lo que el portavoz de IU, Ángel Pérez, le dio la razón al afirmar con ironía que "es cierto que la imagen es una preocupación muy del Gobierno municipal".

"El tercermundismo lo hace la realidad, no es un problema de imágenes. En Madrid hay espacios y realidades que son tercermundistas, y cuando salen a flote y se reflejan en el centro de Madrid al Ayuntamiento no le gusta, porque esa parte tiene que estar bien. En cambio si salen en Orcasitas o en la Cañada Real no pasa nada", reprochó el concejal, manifestando su deseo de que "la preocupación (del Gobierno local) fuera el reequilibrio" y que "también se preocupara por los reflejos tercermundistas en la periferia".

Además, declaró su discrepancia con que el trabajo sea indigno. "Incluso si hubiera alguna indignidad u ofensa al ser humano, la ofensa real son las circunstancias que le llevan a hacer ese trabajo. Y además prohibir sin resolver nada, sin dar alternativas para ganarse la vida de otra forma, es la fórmula más cómoda", concluyó, criticando que "los 'hombres-anuncio' son tan dignos como Fernando Alonso o los jugadores de fútbol", a quienes calificó de "'hombres-anuncio' de lujo'".

El portavoz socialista en el Consistorio de la capital, David Lucas, por su parte, criticó la existencia de "dos barras de medir moralmente", ya que "cuando es el deportista que gana mucho quien lleva el cuerpo lleno de publicidad está bien, pero quien lo hace por un trabajo modesto, no".

"Espero que el Gobierno municipal rectifique, y espero que si hay que regular este servicio se haga, pero creo que este trabajo es tan digno como cualquier otro si se tienen contrato, condiciones laborales dignas... y no creo que sea vergonzoso ir por la calle así", añadió.

El líder del PSOE consideró, por último, que el Ayuntamiento debería "preocuparse más de quitar el caos de la ciudad para distribuir los espacios publicitarios y del uso indiscriminado de la publicidad por parte de las grandes empresas, y menos por las personas que, de manera digna, tratan de ganarse la vida". "Me gustaría que esta misma intensidad se pusiera en la persecución de esa publicidad de las grandes empresas, y espero que el alcalde reconsidere la situación y que regule pero no impida el trabajo", concluyó.