MADRID, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
La delegada de Familia y Servicios Sociales en el Ayuntamiento de Madrid, Concepción Dancausa, puntualizó hoy en el Pleno ordinario de febrero que el Servicio de Mediación Social Intercultural (SEMSI) se ha "refundado", uniendo la presencia de dinamizadores en los parques, pero recriminó al PSOE que "en materia de represión policial (los socialistas) tienen todas las de la ganar".
El "portazo a los trabajadores extranjeros por parte del ministro Corbacho, la detención policial de inmigrantes por cupos, una política de inmigración con una contestación sin precedentes" fueron algunos de los 'ejemplos' puestos por Dancausa a la hora de recriminar al PSOE su postura ante la inmigración. "Ustedes eran los de 'papeles para todos' para decir ahora 'volved a casa que no nos hacéis falta'", añadió.
La delegada matizó además a Zerolo que no se ha suprimido el servicio de mediación social intercultural sino que el anterior contrato, suscrito con la Fundación de la Universidad Autónoma de Madrid, expiró y se procedió a firmar otro, con CEAR. Además, el servicio "se ha refundido uniendo la dinamización en los parques" dando la posibilidad a los antiguos trabajadores del SEMSI, un total de 46, la posibilidad de incorporarse a la nueva adjudicataria. "Así lo han hecho muchos de ellos", señaló Dancausa tras afirmar que en ningún momento se ha pasado a un modelo policial, como denunció el PSOE.
PÉRDIDA DE EMPLEO
El portavoz socialista de Servicios Sociales en el Ayuntamiento de Madrid, Pedro Zerolo, recordó en el Pleno celebrado hoy que, desde el 1 de febrero, los mediadores sociales que trabajaban en los centros sociales municipales perdieron su empleo al ser sustituidos por una nueva figura, la de los dinamizadores sociales, que se limitan a "una labor de control en las zonas públicas".
"Pasamos a un modelo en el que la población inmigrante es el conflicto, es un modelo fracasado que genera tensión", señaló Zerolo tras añadir que si esta decisión se adopta para ahorrarse "300.000 euros" finalmente será una alternativa "cara para la ciudad de Madrid, sobre todo en un momento en el que es esencial la mediación".
Prevenir el racismo, actuar en conflictos sociales como los producidos en la Cañada Real, prestar apoyo a los trabajadores sociales, al Samur social, al tejido asociativo entre los colectivos vulnerables, en programas de lucha contra el racismo y la xenofobia son las labores que realizan los mediadores en una ciudad en la que la tasa de inmigración es de un 17 por ciento. Hasta el momento ejercen en los 25 centros sociales municipales de la ciudad.
El Servicio de Mediación Social Intercultural (SEMSI), tras once años de trabajo, echó el cierre el pasado 31 de enero, después de una larga trayectoria profesional por la que fue premiada en varias ocasiones. Una de ellas por el propio Ayuntamiento de Madrid, en reconocimiento a su labor de apoyo a las familias afectadas por los atentados del 11-M.
