MADRID, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Defensor del Menor, Arturo Canalda, tiene abierto un expediente desde "hace un tiempo" para comprobar cuál es la situación del colegio público San Roque, en Villaverde, donde un alto porcentaje de alumnos, la mayoría de etnia gitana, lleva tres días sin acudir a clase porque se niegan a asistir a las nuevas instalaciones a las que le ha destinado la Consejería de Educación.
Según informaron a Europa Press fuentes de esta institución, el expediente se abrió cuando surgió el problema entre este centro y otro muy próximo en el mismo barrio, el Cristóbal Colón, que solicitó a la Comunidad una solución para acabar con la situación que vivía su centro, bastante deteriorado y saturado de alumnos.
La Comunidad ofreció una permuta siempre y cuando los Consejos escolares de ambos centros estuvieran de acuerdo. Según los padres del San Roque está permuta se rechazó por mayoría absoluta mientras que la Administración asegura que tienen el documento firmado por representantes de sendos colegios y que el intercambio de instalaciones está legalmente autorizado.
De hecho, Educación aseguró ayer que si la situación persiste y los padres continúan impidiendo que sus hijos vayan a clase al centro asignado, pondrá el caso en manos de la Fiscalía de menores porque "incumplen la obligación de escolarizar a sus hijos".
El Defensor del Menor tendrá, por tanto, que comprobar si la permuta supone una actuación racista y si puede generar problemas de escolarización con los estudiantes del San Roque.
Padres afectados, arropados de la FAPA Giner de los Ríos, acudirán hoy a la Asamblea de Madrid, donde se está celebrando desde ayer el Debate sobre el Estado de la región, para intentar leer un manifiesto y ser escuchados por los políticos del Gobierno regional, a su juicio, responsables de la situación.
