MADRID, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
La eliminación del servicio de recogida de muebles y enseres en los portales ahorrará a las arcas del Ayuntamiento de Madrid hasta 430.000 euros anuales, una cifra aproximada ya que el coste depende de las toneladas de los servicios de recogida de residuos, explicó la delegada de Medio Ambiente, Ana Botella, en la última comisión del ramo.
Hasta el pasado 1 de agosto, este servicio, de carácter nocturno, se prestaba mensualmente en Centro, Chamberí, Arganzuela, Retiro, Salamanca, Chamartín y en el barrio de Argüelles mientras que se ponía en marcha cinco veces al año en el resto de los distritos de la capital.
La supresión, como explicó Botella, se enmarca dentro de las medidas extraordinarias a adoptar para reducir el déficit público. "Se ha optado por esta supresión porque consideramos que tendrá poca incidencia en la calidad del servicio prestado a los madrileños ya que la recogida de muebles y enseres por la crisis ha disminuido un 54,4 por ciento en el último año y desde 2007, un 60,1", argumentó la edil.
La 'popular' matizó que los madrileños no van a dejar de contar con este servicio sino que seguirá prestando aunque de otro modo. Y es que los ciudadanos podrán contactar con el Ayuntamiento para la retirada de muebles y enseres a través de 010, sin olvidarse de los puntos limpios, tanto los fijos como los móviles.
"Lo recogido a través de los puntos limpios se ha incrementado en más de 200.000 kilos y los servicios de limpieza recogen seis veces más muebles y enseres que el servicio ahora suprimido", contestó la responsable municipal de Medio Ambiente.
Las explicaciones no fueron suficientes para el portavoz socialista del área, Pedro Santín, que lamentó la desaparición de este servicio al ser "uno de los mejor valorados por los madrileños". "Les resultaba cómodo y ahora su decisión tendrá consecuencias directas en la limpieza de la ciudad", advirtió.
Y es que, en su opinión, obligar a la ciudadanía a acudir a los puntos limpios fijos es casi una misión imposible "si no tienen los medios de transporte adecuados" mientras que de los móviles dijo que "casi nunca se sabe por dónde andan y en muchos casos no recogen objetos muy voluminosos". A eso sumó que el 010 "no es muy operativo".
Santín advirtió de que con la supresión algunos solares de la ciudad se reconvertirán en "basureros de enseres y trastos viejos para ahorrarse 430.000 euros". "Ese dinero nos lo tendrán que descontar de la tasa de basuras. ¿O es que piensan cobrar lo mismo por un menor servicio?", preguntó el edil.
