Actualizado: domingo, 20 julio 2008 14:30
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   MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -

   La organización terrorista ETA ha dado comienzo a su 'campaña de verano' con la colocación de cuatro pequeños artefactos explosivos en playas de las villas turísticas de Laredo y Noja, que sólo han provocado daños materiales de escasa consideración. De esta manera, la banda terrorista vuelve a sus habituales ataques contra puntos turísticos de España, aunque en los últimos años apenas ha tenido actividad durante el periodo estival, ya sea por la tregua o por los atentados de 11 de marzo.

   Esta mañana un comunicante anónimo, que dijo hablar en nombre de ETA, llamó a los Bomberos de la Diputación Foral de Vizcaya alertando de la colocación de cuatro artefactos explosivos en las playas de Laredo y Noja, y en el campo de golf de esta última localidad, los cuales iban a explosionar entre las 12.00 y las 15.00 horas.

   La banda terrorista no atentaba desde el pasado 4 de julio, cuando hizo estallar una bomba contra un repetidor del Gobierno vasco en Elguea (Alava). Previamente, el diario 'El Correo' fue blanco de un ataque, el 8 de junio.

   Sin embargo, los últimos atentados con víctimas mortales se remiten al 14 de mayo, cuando una bomba contra la Casa Cuartel de Legutiano (Alava) provocó la muerte a un agente, Juan Manuel Piñuel, y dejó heridos a otros guardias civiles, y al 7 de marzo, cuando fue asesinado el ex concejal socialista Isaías Carrasco, a tan sólo dos días de las elecciones.

FIN DE LA TREGUA.

   En 2007, el comunicado por el que, el 5 de junio, ETA anunciaba oficialmente el fin del "alto el fuego permanente", en vigor desde marzo de 2006, marcó el inicio del periodo estival. Sin embargo, el verano sólo dejó cinco atentados terroristas, en los que hubo dos guardias civiles heridos de carácter leve, ninguno de ellos contra zonas turísticas.

   El primero de ellos tuvo lugar el 25 de julio, con la colocación de dos artefactos cerca del puerto de Belagua (Navarra), poco después del paso de la caravana publicitaria del Tour de Francia. Posteriormente, el 24 de agosto, un coche bomba estalló en la Casa Cuartel de la Guardia Civil de Durango (Vizcaya) y causó heridas leves a dos agentes, además de importantes daños materiales.

   Además, el 26 de agosto estalló una furgoneta en Castellón, cuyos propietarios habían sido secuestrados el 24 de agosto y retenidos varios días. Días después, el 2 de septiembre, un artefacto de escasa potencia hizo explosión en Fuenmayor (La Rioja) y el 9 de septiembre, los artificierons de la Policía desactivaron un coche bomba frente a la sede del Ministerio de Defensa en Logroño.

   El primer atentado mortal de ETA tras la ruptura de la tregua tuvo lugar el 1 de diciembre en Capbreton (Francia), cuando dos guardias civiles fueron tiroteados tras ser detectados por tres etarras con los que coincidieron en una cafetería. Uno de ellos, Raúl Centeno, falleció en el acto, mientras que el otro, Fernando Trapero, murió cuatro días después.

EN 2005 NO ATACARON INTERESES TURÍSTICOS.

   Las campañas veraniegas anteriores de la banda no tuvieron mucha actividad terrorista, ya sea por la tregua, vigente en 2006, o por las consecuencias de los atentados islamistas del 11 de marzo de 2004 en Madrid. De hecho, en el verano de 2005 no hubo ataques contra intereses turísticos.

   En 2003, ETA inició su campaña estival el 22 de julio con dos atentados contra hoteles de Benidorm y Alicante, que dejaron un total de 13 heridos. Cinco días después, los terroristas hicieron estallar un coche bomba en el aeropuerto de Santander, que sólo provocó daños materiales.

   En 2002, la campaña empezó el 21 de junio, con dos coches bombas en las localidades malagueñas de Fuengirola y Marbella, al inicio de la Cumbre europea de Sevilla, que dejaron ocho heridos. Santander fue nuevamente objetivo de los terroristas un día después, con la explosión de un coche bomba que dejó herido a un policía nacional.

ATENTADO EN SANTA POLA.

   El peor de los atentados de ese verano tuvo lugar el 4 de agosto, cuando un hombre de 57 años y una niña e seis murieron en la explosión de un coche bomba frente al cuartel de la Guardia Civil en Santa Pola (Alicante), que dejó también decenas de heridos. Cinco días después, una bomba estalló en una hamburguesería de Torrevieja, también en Alicante, sin provocar daños personales.

   En 2001, la campaña de verano comenzó en Málaga, con la explosión de un coche bomba en el aparcamiento de la terminal de llegadas del aeropuerto de Málaga, que no dejó daños. Continuó en Tarragona, con la colocación de un coche bomba frente a un hotel de Salou, cuya explosión dejó 13 heridos leves. El aeropuerto de Barajas también fue objetivo de ETA el 27 de agosto, con una bomba que no dejó daños personales, pero sí a más de 100 coches.

   El año 2000, aunque muy activo para la banda, que mató a ocho personas durante la estación estival, entre ellos tres concejales del PP y dos guardias civiles, no tuvo actividades terroristas contra intereses turísticos.

 

 

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