El fiscal pide nueve meses de prisión para un policía que propinó dos puñetazos a una mujer que ejercía venta ambulante

Actualizado: sábado, 13 enero 2007 17:06

La agresión ocurrió en el distrito de Villaverde en el 2004, al oponerse la víctima a que el agente le requisara la mercancía

MADRID, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia madrileña juzgará el próximo viernes, día 19, a un agente de la Policía Municipal del Ayuntamiento de Madrid acusado de propinar dos puñetazos a una mujer que ejercía de forma ilegal la venta ambulante de frutas en el distrito de Villaverde, hechos ocurridos en octubre de 2004 por los que el fiscal solicita la pena de nueve meses de prisión y la inhabilitación especial para el ejercicio de agente municipal.

El escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Europa Press, considera probado que sobre las 10.15 horas del 8 de octubre de 2004 el procesado prestaba servicio de patrulla en compañía de otro policía en el barrio de Villaverde Bajo, en donde encontraron a la denunciante Juana F.T., de 40 años de edad, ejerciendo de forma ilegal la venta ambulante de frutas.

Así, el imputado se bajó del coche para proceder a denunciarla, ante lo que Juana, al reconocer al policía de otras intervenciones, "organizó un gran alboroto para predisponer al público que la compraba contra el agente". Por este tumulto y porque los problemas de circulación impedían que el coche policial pudiera parar para recoger la mercancía incautada, el acusado decidió alejarse del lugar y le indicó a la denunciante que siguiera al coche policial para proceder al decomiso de la mercancía en un sitio más tranquilo.

Una vez alejados del lugar, el imputado comenzó a descargar las cajas de fruta de la furgoneta de la mujer, y "al tratar ésta de impedírselo, el acusado le espetó: 'quítate que te doy dos hostias". Ante la negativa de ella a apartarse, el agente le propinó dos golpes con los puños en el pecho.

Como consecuencia de esta agresión, Juana sufrió un hematoma y una contractura cervical, "así como la agravación del síndrome depresivo que padecía desde hacía varios meses por la conducta del acusado hacia ella". El fiscal considera estos hechos constitutivos de un delito de lesiones, por el que solicita la pena de nueve meses de prisión y la inhabilitación especial para el ejercicio de su empleo. Además, el representante del Ministerio Público pide 2.200 euros para la agredida por la secuela y por las lesiones causadas.