El vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, y el consejero de Transportes regional, Ángel Garrido, atienden a los medios de comunicación tras visitar las instalaciones de Metro.
El vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, y el consejero de Transportes regional, Ángel Garrido, atienden a los medios de comunicación tras visitar las instalaciones de Metro. - CIUDADANOS MADRID - Archivo
Actualizado: miércoles, 11 diciembre 2019 19:18

"La estación de Comillas va a dar respuesta a una reclamación de los vecinos del barrio", ha señalado el vicepresidente

MADRID, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -

La prolongación de la línea 11 de Metro entre Plaza Elíptica y Conde de Casal incluirá una nueva estación en el barrio de Comillas de Carabanchel, que supondrá un coste de 30 millones de euros y con la que se beneficiarán aproximadamente 20.000 personas.

Así lo ha anunciado el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, este miércoles tras visitar el sistema de recuperación de energía en la estación de La Peseta acompañado del consejero de Transportes, Movilidad e Infraestructuras, Ángel Garrido.

"Las obras comenzarán los próximos meses y tendrán un plazo de ejecución de 45 meses. Una vez concluida cerrará el último agujero que quedaba dentro de Madrid capital en la red de Metro", ha sostenido Aguado.

Con la nueva estación de Comillas y la ya anunciada en Madrid Río, la ampliación sumará cinco estaciones más a la línea 11 que, en la actualidad, conecta La Fortuna con Plaza Elíptica y sólo tiene conexión con la línea 6 en esta última estación.

Asimismo, con la prolongación, la línea 11 conectará también con la línea 3 de Metro en Palos de la Frontera; con la línea 1, con el Cercanías y con AVE, larga y media distancia de Renfe en Atocha Renfe; y con la línea 6 y los autobuses interurbanos que dan servicio al corredor de la A-3 en el nuevo intercambiador que se construirá en Conde de Casal.

"La estación de Comillas va a dar respuesta a una reclamación de los vecinos del barrio", ha señalado el vicepresidente autonómico destacando que los residentes de Comillas tendrán, cuando culminen las obras de ampliación, "una conexión directa" con las líneas 1, 3 y 6 de Metro y también con Renfe-Cercanías en Atocha.

A su vez, Garrido ha apuntado que la construcción del nuevo intercambiador en Conde de Casal va a suponer que todas las grandes entradas y salidas de Madrid por las carreteras nacionales van a contar con un gran intercambiador.

INVERSIÓN DE 410 MILLONES DE EUROS

Las obras de ampliación implicarán la construcción de 6,5 kilómetros más de Metro, dos nuevas estaciones (Comillas y Madrid Río), y la ampliación de otras tres para acomodar el trasbordo entre la línea 11 y las líneas 3, 1 y 6. La Comunidad va a invertir aproximadamente 410 millones de euros en la prolongación de la línea 11 hasta Conde de Casal, con un plazo previsto para la ejecución de las obras de 45 meses.

La ampliación de la línea 11 de Metro hará que el número de usuarios de esta línea se triplicará de 25.000 a 75.000, y contribuirá a "descargar" la línea 6 al potenciar la conectividad transversal de la red en el sector sureste. Además, sumará una segunda parada de Metro a la Estación de Atocha, centro principal de las comunicaciones ferroviarias del país.

Según el estudio del proyecto de ampliación de la línea 11, la mayor parte de la demanda que tendrá la prolongación proceden del entorno de las estaciones de Palos de la Frontera, Madrid Río (a la altura de Santa María de la Cabeza) y Conde de Casal. Los vecinos del barrio de Comillas sumarán entre 3.800 y 4.000 viajeros al día, una demanda que, además, prácticamente "se ha duplicado respecto a los primeros estudios preliminares que se realizaron en 2017".

El año pasado, la línea 11 transportó a más de 800.000 viajeros, y se espera un incremento de demanda superior a 75.000 viajeros diarios procedentes también de los distritos de Carabanchel, Usera, Arganzuela y Retiro, por donde discurrirá la prolongación.

RECUPERACIÓN DE ENERGÍA

Junto a la nueva estación de Comillas dentro de la ampliación de la línea 11, el vicepresidente y el consejero también han visitado el sistema de recuperación de energía de la frenada mediante celdas reversibles de Metro que ahorra, cada una de ellas, el equivalente al consumo energético anual "de mil hogares".

Estos sistemas aprovechan la energía procedente del frenado de trenes para el funcionamiento de otras instalaciones de la red como ascensores, escaleras mecánicas, torniquetes o luminarias, entre otras, según ha explicado Aguado.

El suburbano madrileño cuenta con cuatro equipos de recuperación de energía en las subestaciones eléctricas de La Peseta (línea 11), Hospital de Móstoles (línea 12), La Moraleja (línea 10B), que ya están en funcionamiento, y Barrio del Puerto (línea 7B), que entrará en uso en el primer trimestre de 2020.

Garrido ha apuntado que el proyecto piloto de las celdas se desarrolló entre los años 2014 y 2016 en la estación de Feria de Madrid, donde estos días se celebra la Cumbre del Clima y que, tras comprobar que los resultados eran muy "satisfactorios", Metro de Madrid decidió emprender esta medida como parte de un plan energético, que cuenta con una inversión de 1,2 millones de euros, que permitirá "no sólo ahorrar energía, sino contaminar menos y mejorar la calidad del servicio".

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