MADRID, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
La asociación que representa a los españoles deportados pide al Ayuntamiento que "eliminen definitivamente de plazas y calles los nombres y vestigios de la dictadura franquista"
MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Madrid instalará antes del verano un memorial a los 549 republicanos madrileños deportados al campo de concentración nazi de Mauthausen, un reconocimiento que se levantará en la plaza que se encuentra a espaldas de la Casa de la Villa.
Así lo ha anunciado este viernes el tercer teniente de alcalde y responsable municipal de Derechos Humanos, Mauricio Valiente, un día antes de que se conmemore la jornada designada por la ONU de reconocimiento a las víctimas del Holocausto, la fecha de liberación del campo de exterminio de Auschwitz por las tropas rusas en 1945.
Antes de eso, en el Pleno de la semana que viene se rendirá homenaje a estos luchadores antifascistas leyendo en el Palacio de Cibeles los nombres de los 549 vecinos de Madrid, una iniciativa propuesta por el Grupo Municipal Socialista.
Formaron parte de un grupo de 10.000 republicanos españoles, hombres y mujeres, que fueron deportados a campos de concentración "con la colaboración, activa o pasiva, de la dictadura franquista", ha sostenido el concejal Valiente. "Nadie se acordó de ellos en su deportación y queremos reparar esa injusticia cruel", ha declarado el tercer teniente de alcalde.
El acto, que ha comenzado con un minuto de silencio y ha acabado con velas encendidas en recuerdo a las víctimas del Holocausto, es una iniciativa del Ayuntamiento en "la necesidad de no olvidar" para construir "un futuro libre de violencia y de persecuciones por cuestiones de religión, etnia, opinión política u orientación sexual".
RECHAZO AL NEGACIONISMO
"Desde el Ayuntamiento manifestamos el más absoluto rechazo a toda negación, ya sea total o parcial, del Holocausto como hecho histórico", ha subrayado el tercer teniente de alcalde, que ha dedicado el homenaje municipal al "sufrimiento del pueblo judío, a innumerables personas de otras minorías y grupos de población víctimas del exterminio y represión del nazismo, como la comunidad gitana, LGBT y los españoles antifascistas deportados a campos de concentración".
Tanto la instalación del memorial como la lectura de los nombres de los represaliados republicanos madrileños son "memoria cargada de futuro", que exige "el derecho a la verdad, el derecho de las víctimas y el de la sociedad a conocer lo que ha ocurrido". "El Ayuntamiento tiene la obligación de poner en marcha acciones que transmitan lo que fue el Holocausto a las generaciones futuras para prevenir actos de genocidio", ha indicado.
Desde el último homenaje a las víctimas del Holocausto por parte del Ayuntamiento, el primero realizado, hace ahora un año, el Consistorio ha colocado una placa en memoria de todos los madrileños que murieron asesinados en los campos de concentración. Está instalada en el de Mauthausen.
Por parte de la asociación Amical Mauthausen, Concha Díaz, en representación de los españoles que estuvieron en los campos de concentración, ha declarado desde la Casa de la Villa que no se quería olvidar de nadie y ha dado un papel destacado al que "desgraciadamente el régimen nazi destinó al pueblo judío". "No cabía en la sociedad nazi los adversarios políticos, los discapacitados, los gitanos, los vagabundos, los testigos de jehová... Los consideraban inferiores en su legislación racista y sectaria y decidieron la aniquilación física, como hicieron con el pueblo judío, o el trabajo esclavo hasta la muerte para cientos de miles de personas", ha condenado.
SILENCIO Y OLVIDO
Mención especial han merecido los 10.000 republicanos españoles en Francia que fueron deportados a los campos de concentración nazi entre 1940 y 1945 "por ser luchadores antifascistas". "El régimen alemán les consideró enemigos políticos del Tercer Reich y con la complicidad de Vichy y la aquiescencia de la dictadura franquista fueron considerados apátridas", ha recordado.
A estos luchadores por la libertad se les condenó "al silencio en la dictadura franquista y al olvido en la transición", con un "pobre reconocimiento institucional hacia las víctimas del nazismo durante la democracia" hasta ahora, "paliado en parte con los reconocimientos de personalidades y representantes políticos en actos y localidades en los últimos tiempos".
La asociación ha instado a que una delegación municipal visite con ellos cada mayo el campo de Mauthausen, donde está la placa de reconocimiento a los madrileños deportados. El año pasado encabezó la delegación municipal el tercer teniente de alcalde. Pero también han puesto deberes a la Corporación, como que "eliminen definitivamente de plazas y calles los nombres y vestigios de la dictadura franquista".
Desde la asociación Amical Mauthausen advierten del peligro de la "desintegración de los valores democráticos en países de la UE y en el redto del mundo recuperando tentaciones populistas, nacionalistas, xenófobas y cuando no abiertamente fascistas construyendo muros contra quienes huyen del hambre y de la guerra, se responde con consignas nacionalistas ante el desempleo y se ponen obstáculos a la circulación de personas. Este no es el mundo con el que los supervivientes soñaron en el día de la liberación", han terminado.
