MADRID, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los madrileños mayores de 65 años de edad están recibiendo cartas a domicilio remitidas por el Ayuntamiento de la capital en las que se les da consejos para afrontar la llegada de las altas temperaturas. No salir en las horas centrales del día, evitar el ejercicio físico, beber agua, zumos o infusiones, y comer fruta y verdura son algunas de las recomendaciones que figuran en las 55.000 misivas editadas.
De forma complementaria, el Consistorio distribuye 40.000 folletos entre los usuarios de Centros de Mayores y Centros de Día, así como los beneficiarios de ayuda a domicilio, teleasistencia, etcétera, informó hoy la Administración local.
Entre las recomendaciones para cuidarse del calor, especialmente dirigidas a los ancianos que superan los 80 años de edad, figuran también caminar despacio, buscando la sombra y protegiéndose con gorras, sombreros y abanicos; evitar las bebidas alcohólicas y con cafeína; tomar comidas poco abundantes, varias veces al día; y usar ropa ligera que permita la transpiración, preferiblemente de colores claros.
Ventilar la casa durante las primeras horas de la mañana y por la noche, bajar las persianas en las horas de más calor, y refrescar las sábanas e hidratar frecuentemente a los enfermos encamados son otras medidas que contribuyen a pasar mejor el verano.
SÍNTOMAS DE PROBLEMAS
Aparte de los ancianos, la población con más riesgo de sufrir los efectos negativos del exceso de calor son los menores de cinco años; las personas con sobrepeso, enfermedades crónicas o que toman varios medicamentos a la vez, y aquellas para las que la realización de ejercicio físico supone un especial esfuerzo.
Agotamiento, mareos, náuseas, cansancio, calambres, sudor intenso y palidez son algunas consecuencias de las altas temperaturas. En concreto, el golpe de calor se manifiesta con temperatura superior a 39,5º, dolor de cabeza, piel roja, caliente y sin sudor, confusión e incluso inconsciencia.
En caso de sentir algunos de estos síntomas, se recomienda llamar al 112 o a activar la teleasistencia, si el afectado es usuario del servicio; colocarse a la sombra, enfriar el cuerpo mojándolo con agua fresca y abanicándolo, y beber líquidos lentamente, aunque éstos no deben ofrecerse si la persona está inconsciente.
