MADRID, 5 Sep. (EUROPA PRESS) -
La senadora del PSOE por Madrid y responsable de estudiar la situación de la agrupación socialista de Móstoles desde 2008, Matilde Fernández, ha considerado que, llegado el caso, sólo debería darse el derecho a voto a los 150 militantes de la agrupación que han demostrado su compromiso con el partido durante este tiempo.
En declaraciones a Europa Press, Fernández ha subrayado que la decisión tomada por la Comisión de Ética y Garantías del PSOE, que apunta a devolver el derecho a voto de los militantes de la agrupación suspendida, no debe aplicarse a las 699 personas que figuraban en el censo en el momento de su disolución, pues ello supondría considerar que la decisión de su cierre tomada por la Ejecutiva Federal y Regional, era errónea.
"Permitir el voto a los 699 me parece imposible, no tiene sentido, sería como decir que no hemos hecho las cosas bien, cuando lo cierto es que se suspendió por hechos muy graves", ha manifestado. La senadora ha admitido que puede considerarse que el trabajo de análisis de la situación en esta agrupación ha sido demasiado largo, pero ha explicado que ella ha realizado un trabajo "serio, minucioso y artesano", pues cada viernes, después de su horario laboral, iba a Móstoles, abría el local y recibía uno a uno a los militantes del censo.
"He hecho un trabajo muy serio, he hablado o visto a unas 300 personas y en torno a otras 300 no han aparecido porque no tenían teléfono (y entonces les he enviado cartas), figuraban direcciones erróneas, teléfonos que no correspondían, personas desconocidas en determinados domicilios, etc.", ha especificado Fernández, que cada día que ha acudido a Móstoles lo ha hecho en MetroSur.
Por este motivo, en el primer informe que realizó, hace ya un año, abogó por reafiliar a las 150 personas, que coincidiendo con las elecciones europeas, acudieron a su llamamiento para colaborar en las mesas electorales. "Creo que se podría utilizar ese criterio. Elegir a los militantes que han demostrado un compromiso con su partido, que se han mostrado responsables y que cuando se les llama, van", ha indicado.
Por otra parte, ha explicado que la Comisión Ejecutiva Federal está buscando una salida para conjugar los derechos individuales, como es el voto, con los derechos colectivos, teniendo en cuenta que la normativa del PSOE establece como filosofía general que cuando se disuelve una agrupación sus miembros pierden su capacidad de elegir y quedan inhabilitados en sus derechos, quedando en un "limbo o durmientes.
"Lo que no se puede permitir es que personas que no han ido nunca, y sólo van a votar cuando tocan el pito, se les considere militantes de pleno derecho. Son personas que no sienten nuestro partido", ha manifestado la senadora. En este sentido, ha relatado múltiples casos de irregularidades, tales como que se detectaron afiliaciones repentinas de grupos de 60 personas y cuentas corrientes desde las que se pagan las cuotas de personas de diferentes familias.
Fernández aboga por "hilar muy fino" si se pretende volver a reafiliar a los militantes, puesto que hay casos muy graves como los de dos concejales del PSOE que, gobernando el municipio, de pronto se pasaron al Grupo Mixto al no conseguir que sus ideas sobre urbanismo se aplicasen, votando con el PP y desestabilizando así al Gobierno.
En este caso, estas personas fueron sancionadas con dos años, y no expulsadas, por acuerdo con la Ejecutiva Federal de aquel entonces, que admitió esas situaciones. Para Fernández, los dos informes que ha realizado durante estos dos años pueden arrojar la luz necesaria que esclarezca cuáles son las personas que realmente cumplen las condiciones que deben tener los militantes del PSOE.
Otra prueba más de las irregularidades que se daban en estas fechas, bajo la secretaría general de Rafael Simancas, es que de los casi 400 militantes afiliados entre 2001 y 2008, solamente el 10 por ciento, unas 40 personas, han dado señales de vida durante el largo proceso que Fernández ha llevado a cabo para detectar los militantes auténticos.
