Metro y EMT tendrán que endeudarse tras la reducción de la partida municipal para inversiones al Consorcio de Transportes

Actualizado: viernes, 24 octubre 2008 21:33

MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -

Metro de Madrid y la Empresa Municipal de Transportes (EMT) tendrán que endeudarse para pagar sus propias inversiones después de que el Ayuntamiento de Madrid haya reducido sus aportaciones en materia de inversión en su participación en el Consorcio Regional de Transportes.

Según informaron a Europa Press fuentes municipales, el Proyecto del Presupuesto General del Consistorio madrileño recoge un incremento en la aportación al Consorcio, tanto para los autobuses, como para el suburbano, que supone un total de 245 millones de euros. El próximo lunes, el Consejo del Consorcio decidirá la distribución de esta cantidad en sus distintos medios de transporte.

El delegado de Hacienda del Ayuntamiento de Madrid, Juan Bravo, indicó hoy que esta aportación de 245 millones de euros supone un incremento del 15,4 por ciento, que, a su juicio, se justifica con el incremento de costes que tanto las empresas operadoras en superficie (EMT) como el Metro han tenido en los últimos meses "porque no hay que olvidar que la gran carga de estas empresas desde el punto de vista de su estructura de costes es el combustible y la energía eléctrica".

"Por eso, tanto la Comunidad de Madrid como el Ayuntamiento tenemos que concurrir con un incremento de un 15 por ciento para sufragar y subvencionar el precio que el usuario abona cuando realiza un viaje", añadió.

Sin embargo, en este nuevo Presupuesto se reducen las aportaciones para las inversiones, lo que obligará a ambas sociedades a endeudarse. En el caso de la EMT, se endeudará en más de 74 millones de euros para atender sus inversiones en infraestructuras y en renovación de la flota de autobuses.

Metro de Madrid, además, tendrá que hacer frente al 10 por ciento de más que paga en servicios de limpieza desde que a finales del pasado año el personal responsable de esta tarea negociara su convenio colectivo, no sin antes, producirse unas agresivas huelgas que llenaron de basura los pasillos del suburbano.

Para mantener su actividad al mismo ritmo que hasta ahora, ambas empresas deberán recurrir, o bien al incremento de los billetes con el consiguiente perjuicio directo al usuario, o bien, el aumento de la participación de la Comunidad de Madrid y del Ayuntamiento en el Consorcio.

La primera opción podría suponer un grave problema para el ciudadano de a pie, que ha visto como en un año, las tarifas de los billetes han subido en dos ocasiones --la habitual de primeros de año y una inesperada en agosto que el Consorcio relacionó con la subida de los carburantes--.

Además, a este problema hay que añadirle que está cayendo la demanda en el transporte público madrileño, y el 50 por ciento del uso de este tipo de transporte no es obligatorio, es decir, que la mitad de los viajes que se hacen no son ni por trabajo ni por estudios, algo que se nota especialmente los fines de semana, donde esta caída de demanda se esta apreciando de forma más precisa.

El Consorcio Regional de Transportes de Madrid se constituyó en 1986 para agrupar los esfuerzos de instituciones públicas y privadas relacionadas con el transporte público, con el fin de coordinar servicios, redes y tarifas, de forma que se ofrezca al usuario una mayor capacidad y mejor calidad de la oferta. El Estado, la Comunidad de Madrid, los municipios así como las empresas públicas y privadas colaboran de manera estrecha en este esfuerzo común.