Noventa trabajadores murieron en accidente laboral en 2009 en la región, un 30% menos que el año pasado

Actualizado: viernes, 1 enero 2010 15:34

Los sindicatos achacan el descenso a la caída de la actividad laboral y no al aumento de las medidas preventivas

Aseguran que todos estos siniestros se podrían haber evitado y, de hecho, la mayoría han sido denunciados en Inspección de Trabajo

MADRID, 1 Ene. (EUROPA PRESS) -

Noventa trabajadores han muerto en accidente laboral en 2009 en la Comunidad de Madrid, lo que representa un 30 por ciento menos que el año pasado, cuando fallecieron en el 'tajo' 134 personas, lo que muestra una tendencia a la baja, pues supone más de un 40 por ciento menos que en 2007, que terminó con 152 muertes.

Según datos regionales, hasta el 1 de diciembre perdieron la vida en el trabajo 86 personas. Hasta el 17 de este mes, según indicaron a Europa Press fuentes sindicales, aumentaron a 90. Dos días después, falleció en el hospital un trabajador que horas antes le había caído encima varios palés en una empresa de Getafe. No obstante, estos datos son provisionales y se confirmarán a principios de este año cuando se cotejen los aportados por la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Trabajo e Inmigración.

Según datos del Instituto Regional de Seguridad y Salud en el Trabajo de la Consejería de Empleo y Mujer, en el primer semestre del año se registraron 46 siniestros laborales, 11 de ellos 'in itínere'. La mayoría perdieron la vida en el sector servicios (22), en construcción (8), seguido de la industria (5). No obstante, el número de accidentes laborales totales fue de 56.776 (8.309 en 'itínere'). De enero a junio hubo también 295 heridos graves y 8.238 leves.

A falta de confirmar los datos del mes de diciembre, de julio al 30 de noviembre se contabilizaron 45.795 accidentes laborales, 26 mortales, 223 graves y 45.532 leves. El tercer trimestre del año fue el que más fallecidos acumuló, con 26.

Hasta diciembre, de los 86 accidentes laborales mortales registrados, 69 se produjeron en la jornada laboral (un 22,47 por ciento menos que los 89 registrados en el mismo periodo del año pasado), y los 17 restantes fueron 'in itínere' (en el trayecto al ir o volver al/del lugar de trabajo), frente a los 33 del pasado año, lo que supone una reducción del 48,48 por ciento.

El número total de accidentes bajó un 21,57 por ciento en los 11 primeros meses de 2009 respecto al mismo periodo del año pasado, un descenso que se refleja sobre todo en la construcción (-35,04 por ciento) pero también en la industria (-31,96 por ciento) y los servicios (-16,60).

MENOS ACCIDENTES POR LA CRISIS Y EL PARO

En declaraciones a Europa Press, la responsable de Salud Laboral y Siniestralidad de UGT-Madrid, Rosa María Robledano, calificó como "inasaumibles e inaceptables" estas cifras y achacó el descenso a la caída "importantísima" de la actividad laboral.

Por ello, pidió "tolerancia cero" ante la siniestralidad laboral, por lo que reclamó a las empresas y a las administraciones "máxima sensibilidad y responsabilidad" para que se acometan las medidas preventivas, "que no tienen que revertirse" por la crisis.

UGT-Madrid solicitó también al Gobierno regional un máximo seguimiento a las empresas. "Algunas están incumpliendo las medidas de seguridad y otras no son sensibles a la hora de obligar a los trabajadores al cumplimiento de las medidas de prevención", indicó, al tiempo que destacó que los accidentes laborales han caído en el Sector de la Construcción por el "tremendo paro" del sector, mientras que en el Sector Servicios han aumentado respecto al año pasado.

En el mismo sentido se expresó el responsable de Salud Laboral en el trabajo de CC.OO., Carmelo Plaza, que achacó la caída de la siniestralidad al descenso de la actividad laboral, a la crisis y al paro y a la precariedad en el trabajo, "donde priman otras cuestiones y no la seguridad", "pero no a las políticas preventivas, que se han visto recortadas".

Plaza manifestó a Europa Press que en todos los accidentes laborales traumáticos ocurridos en la región en 2009 se han detectado falta de medidas de seguridad. "La mayoría son multicausales y en todos los casos se incumple la Ley de Prevención. Todos los accidentes, individualmente, son evitables", precisó.

El portavoz sindical acusó a muchos empresarios de ser negligentes por no obligar a sus empleados a que trabajen con los oportunos medios, formación y medidas preventivas. "Si el trabajador quiere trabajar sin protección, es el empresario el que tiene que pararlo, no permitirle seguir y sancionarlo", recordó.

Por otro lado, Plaza criticó que muchos siniestros en el trabajo no sean considerados oficialmente como tal. Éste es el caso de la empleada del hogar que murió al caerse al vacío cuando limpiaba los cristales de una casa en noviembre. "No engrosará las listas desde el punto de vista estadístico porque el domicilio nunca se considera centro de trabajo, aunque sea un accidente laboral", criticó. Asimismo, reveló que ni el guardia civil ni el policía nacional que perdieron la vida este mes mientras señalizaban una carretera serán considerados oficialmente como accidentes laborales por el estatuto especial al que estaban adscritos, al igual que les ocurre a los autónomos.

"Creo que tenemos que hacer algo, que es desarrollar las políticas acordadas en el marco de la Comunidad de Madrid y el Plan Director, que nos obliga a todos a adoptar políticas preventivas en todos los centros de trabajo de la región", concluyó el responsable de Salud Laboral de CC.OO.

LOS ACCIDENTES MÁS IMPORTANTES

Entre los primeros accidentes mortales destaca el que sufrió un trabajador de limpieza pública viaria el 14 de enero en la capital. El obrero, marroquí de 39 años, se precipitó al vacío cuando se encontraba nivelando un pilar en el último forjado de la obra. Fue denunciado ante Inspección de Trabajo por CC.OO, que pidió que se paralizara la obra.

El 5 de marzo falleció un fontanero ecuatoriano de 48 años tras caerse del tejado de una carpintería que estaba reparando en Torrejón de Ardoz. Pocas semanas después, el mismo sindicato denunció el fallecimiento el 28 de marzo de un obrero rumano que trabajaba sin contrato y que falleció al caerse de la fachada de un edificio de Coslada.

El 5 de mayo murió otro hombre tras permanecer dos semanas muy grave en el hospital como consecuencia de las lesiones provocadas mientras trabajaba en un almacén madrileño. También, tras 15 días ingresado, murió el 21 del mismo mes un electricista que se cayó desde una altura de ocho metros mientras trabajaba en las obras del aparcamiento de la calle Montalbán, junto a la actual sede del Ayuntamiento de Madrid. CC.OO señaló que dicha obra no paró ni un día festivo como el 1 de mayo, "incumpliendo así el convenio del sector", lo que llevó a los sindicalistas a paralizarla.

En mayo también falleció un trabajador al quedar atrapado por una carretilla en el Centro y parque de Vehículos de Ruedas, recinto perteneciente al Ministerio de Defensa; y otro tras ser aplastado por un climatizador en el aparcamiento de la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.

Ya en verano un obrero murió y otros dos resultaron heridos graves al caer sobre ellos el forjado de un edificio en construcción en el PAU de Carabanchel. Por otro lado, un hombre feneció al ser aplastado por un fardo metálico en las obras de construcción del tren a Navalcarnero-Móstoles; y una mujer le cayó encima una tolva de un montacargas mientras trabajaba en la Fábrica de la Moneda.

Uno de los accidentes laborales más impactantes fue el de la empleada doméstica el 21 de noviembre, que se precipitó de una cuarta planta de un edificio mientras limpiaba los cristales de una casa particular. Esa misma semana murió un obrero que se cayó de un tejado de Leganés. CC.OO denunció ambos siniestros "ante la evidente falta de medidas de seguridad".