Casi ninguno tenía carteles prohibiendo la entrada a animales ni se informaba de teléfonos y centros médicos para casos de emergencias
MADRID, 18 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los parques infantiles de Madrid destacan por su limpieza y seguridad, pero suspenden en materias de información al público, según un estudio realizado por Eroski Consumer recogido por Europa Press, que otorga a estas instalaciones una nota global de 'aceptable'.
Tras analizar doce áreas de recreo infantil y 102 elementos de juego de la capital, los expertos de Eroski Consumer adjudican un "pobre 'aceptable'" a la capital, por detrás de otras ciudades como Cádiz, Barcelona, Córdoba, Granada, Pamplona y Vitoria, pero por delante de Oviedo y Sevilla, las peor paradas del ranking.
Por apartados, las mejores calificaciones en la capital recayeron en los apartados de limpieza-mantenimiento y seguridad ('muy bien') mientras que la información disponible y las medidas de accesibilidad son sólo 'regulares'. Según un estudio similar realizado hace cinco años, la limpieza y la seguridad mejoran desde el 'bien' que obtuvieron entonces, pero se mantienen las deficiencias ya existentes hace un lustro.
Así, se destaca que todos los recintos tienen pavimento de arena limpia y sin apelmazar, y que la distancia entre los elementos de juego es la adecuada. También se hallaron reparos en que uno de los parques no estaba delimitado pese a la existencia de tráfico cercano.
En cuanto a la información, en la mitad de las zonas estudiadas no había cartel prohibiendo la entrada a animales domésticos, en tres de cada cuatro no se indicaba un número de teléfono para llamar en caso de emergencia, y en ninguno se indicaban los centros médicos más cercanos para llevar a los niños en caso de accidente.
Además, sólo uno de los parques tenía escaleras en su acceso aunque salvada por rampas, mientras que once no tenían juegos a ras de suelo para menores con problemas de movilidad y en ninguno había indicaciones en braille.
En cualquier caso, el estudio recuerda que "no hay una legislación en España que regule cómo han de ser los parques infantiles en materia de seguridad y calidad". Por ello, el informe se basa en la normativa comunitaria UNE-EN 1176 y 1777 y en el asesoramiento de expertos.
Las zonas mejor valoradas de las que visitaron los expertos fueron las de los parques de Manuel Becerra, Carlos Arias Navarro, Avenida de Andalucía 21-Villaverde, parque Sur, Caramuel 58, parque Calero y parque Berlín. Sin embargo, las instalaciones de Castellana 132, parque de la Vaguada, plaza de Aluche, jardines de Gregorio Ordóñez y parque de Roma no pasan el 'examen'.
ELEMENTOS DE JUEGO
En cuanto a los elementos de juego, de los 102 analizados en la capital casi ninguno tenía desperfectos, y éstos se limitaban a desconchados en la pintura o alguna parte suelta. Esto "mejora la realidad de hace cinco años, cuando el 38 por ciento de los aparatos tenían defectos frente al 3 por ciento actual".
Además, según indicaron fuentes municipales a los redactores del informe "los servicios del Consistorio inspeccionan cada dos o cuatro días estos parques" y en ellos se invierte "una media de 9,6 millones de euros al año".
En cuanto a las estructuras multijuego, cuatro de las 17 analizadas no tenían barandilla en la escalera y en las zonas de paso de la estructura, pese a que la plataforma superior de seis de ellos se encontraba a más de un metro del suelo.
Frente a esto, todos los balancines contaban con asideros y reposapiés con sus muelles "en perfecto estado", si bien se alerta de que "sólo en la mitad de los parques se vio debajo del asiento algún tipo de material para amortiguar posibles caídas". Por lo que respecta a los columpios, las cuerdas, asientos y anclajes estaban en estado "óptimo" de conservación, sin elementos peligrosos y con un funcionamiento normal.
Los toboganes también resultaron tener peldaños y barandillas en perfecto estado, rampas correctas y carentes de elementos potencialmente peligrosos como aristas, bordes no redondeados, etcétera.
Finalmente, los 39 muelles funcionaban con normalidad y, excepto uno, presentaban un buen aspecto exterior. Además, no existe la posibilidad de que los niños se pillen los dedos porque no había huecos al descubierto y el anclaje al suelo era correcto en todos los casos. Sin embargo, sólo uno tenía un sistema para amortiguar caídas bajo el asiento.
En total, Madrid cuenta con 1.825 zonas de juegos infantiles. De ellas, Eroski Consumer ha analizado doce, que se suman a las 120 más analizadas en otras 17 ciudades españolas. En total, se ha estudiado el estado de 739 aparatos de juego.
