Según el Gobierno autonómico, en la región hay 1.050 médicos infantiles y el ratio óptimo sería de 1.100 niños para cada uno
MADRID, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad de Pediatría de Madrid reclamó hoy una mayor planificación por parte del Gobierno regional en la asignación de los pacientes a cada profesional, así como un incremento en el número de plazas para que no se reduzca la calidad de la atención a los niños en la región y para que no se deriven este tipo de pacientes a los médicos generales.
La presidenta de la entidad, María Teresa Muñoz Calvo, explicó a Europa Press que "el problema de Madrid es que, con el aumento de la inmigración en los últimos años, hay un déficit de pediatras", y añadió que muchos de los médicos de esta rama "no quieren ir a atención primaria cuando acaban sus residencias, sino que prefieren trabajar en un hospital o, incluso, en el extranjero, donde les pagan mejor".
Según datos del Gobierno regional, en la Comunidad de Madrid trabajan unos 700 pediatras en los centros de atención primaria y alrededor de 350 en los hospitales, que deben atender a los 890.748 niños menores de 14 años y, en ocasiones, a muchos de los jóvenes hasta la mayoría de edad. Según fuentes de la Asociación Española de Pediatría consultadas por Europa Press, el ratio máximo debe ser de "unos 1.100 niños por cada pediatra".
Además, el Ejecutivo autonómico admite que existe un problema porque no hay pediatras "suficientes", sobre todo por la gran cantidad de inmigrantes que viven en Madrid. "Sin embargo, es el Ministerio de Sanidad el que debe solucionar el problema asignando más profesionales a las plazas del MIR en la Comunidad", reclamaron fuentes de la Consejería de Sanidad consultadas por Europa Press.
Sin embargo, según Muñoz, una "mejora en las condiciones económicas y laborales de los pediatras" haría más atractivo el trabajo en los centros de atención primaria. "Ahora, los médicos deben hacer sus guardias en los hospitales de su área y al día siguiente ir al centro, y eso no lo aguanta nadie", subrayó la presidenta de la Asociación.
En estas circunstancias, la Comunidad ha llegado a una situación de falta de pediatras que "repercute directamente en la calidad del servicio", porque por un lado, los pocos especialistas de la región deberán visitar a más niños y, sobre todo, porque se están empezando a derivar estos casos a médicos generales, que no son especialistas", denunció Muñoz.
La solución pasa, según la Asociación de Pediatría, por que "la Consejería de Sanidad planifique adecuadamente el número de pediatras que son necesarios en la región y que intente que los profesionales no se vayan al extranjero". "Así no habrá que sustituirlos por médicos de otros países o por doctores no pediatras", añadió María Teresa Muñoz.
Para la Consejería de Sanidad, "el que sean los médicos de familia quienes atienden en algunos casos a los niños no plantea ningún problema", ya que "un médico de cabecera puede tratar tanto a niños como a adultos".
FALTA DE VOLUNTAD
La presidenta de la Asociación del Defensor del Paciente, Carmen Flores, incidió en que, quizá, se podría "agilizar los trámites para homologar los títulos de pediatría de otros países, o crear más plazas" para este tipo de medicina, y recalcó que "este tipo de soluciones, que ya existen en otras comunidades autónomas, requieren de voluntad de arreglar el problema".
Por su parte, tampoco el Ministerio de Sanidad parece estar tomando medidas, ya que según reclamó la Asociación del Defensor del Paciente, "está mirando solamente a las bebidas y al tabaco, dejando sin atender otros problemas muy serios para muchos".
En caso de que no se pongan medidas para solucionar esta situación, Muñoz ya avisó de que "se llegará a una situación en la que esta especialidad esté totalmente privatizada, cuando haya un 30 por ciento o más de médicos no pediatras atendiendo a niños".
Flores añadió que su organización ya "ha recibido muchas quejas de gente que dice que no quiere que a su hijo lo vea un médico de cabecera, sino que quieren un pediatra".
"Me da la impresión de que lo único que se busca es ahorrar. Cogemos a los médicos de cabecera y, si tienen 200 pacientes, se les ponen unos cuantos niños más, pero ellos no tienen por qué asumir ni esa responsabilidad ni esa presión. La solución no es pagar a menos especialistas explotando a los médicos de familia", criticó la presidenta de la Asociación del Defensor del Paciente.
Sin embargo, desde su plataforma no se muestran muy optimistas con que este problema cambie, ya que el nuevo consejero de Sanidad, Juan José Güemes, "parece que no tiene ni idea" y, aunque le han pedido una entrevista, están convencidos de que "seguirá en la misma línea que el ex consejero, Manuel Lamela".
"Alguna vez pasará algo dramático porque algún médico se equivocará al tratar a un niño por falta de los conocimientos pediátricos específicos y entonces nos lamentaremos", sentenció Flores.
