MADRID, 13 Abr. (EUROPA PRESS) -
Más gastos en construcción de infraestructuras, en transportes y menos eficiencia energética serán algunas de las consecuencias de los siete nuevos Planes Generales de Ordenación Urbana (PGOU) que aprobará la Comunidad antes de que finalice el año, según Ecologistas en Acción.
Alcobendas, Móstoles, Las Rozas, Colmenar de Oreja, Navalcarnero, Meco y Moraleja de Enmedio podrán tener listos sus Planes Generales antes de que acabe el año sumando más de 17.000 viviendas protegidas al parque madrileño, un número final que tiene en cuenta las limitaciones que marca la Ley de las cuatro alturas en cuanto a la edificabilidad.
Según fuentes de la Consejería de Medio Ambiente consultadas por Europa Press, la posibilidad de edificar viviendas en estos siete municipios, que ya han superado la tramitación medioambiental, se reducirá en un 70 por ciento de media.
Pero esa reducción en la edificabilidad no es vista desde todos los sectores como un guiño al medio ambiente. Desde Ecologistas en Acción, la coordinadora María Ángeles Nieto opinó en declaraciones a Europa Press que la Ley de las cuatro alturas es "más perjudicial que beneficiosa porque promueve un tipo de ciudad dispersa en la que no prima la calidad sino la estética".
Para Nieto, la nueva normativa es "contraproducente e irracional" porque una ciudad puede ser "perfectamente habitable" con más de cuatro alturas. "Está claro que un promotor no va a perder beneficios así que si no construye a lo alto lo hará a lo ancho, lo que supondrá una mayor ocupación del territorio", aseveró.
Los ecologistas criticaron que precisamente esto es lo que ha ocurrido en Brunete, el primer municipio que ha conseguido aprobar su PGOU en esta legislatura. En él "no se ha producido una reducción de la superficie reclasificada sino de la eficabilidad", lo que trae consigo "una ciudad menos compacta que exige más gastos en infraestructuras, en transportes porque obliga a coger el coche y que genera menos eficiencia energética".
La normativa regional, incluida en la Ley de Medidas Urgentes de Modernización, pretende que todas las nuevas construcciones tengan tres alturas más ático para dotar de "la máxima protección a los terrenos con importantes valorales naturales", según un comunidado de la Consejería. Dicha normativa puede no aplicarse si el PGOU ha obtenido ya la aprobación provisional aunque los ayuntamientos pueden decidir adaptarse a ella a pesar de contar con este primer visto bueno.
