MADRID, 16 May. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un grupo organizado especializado en cometer robos con fuerza en establecimientos comerciales, tras detener a quince rumanos a los que se les han intervenido efectos valorados en 420.000 euros, informó hoy el Ministerio del Interior.
A los detenidos se les imputa hasta el momento la comisión de catorce asaltos en comercios y el robo de diez vehículos de alta gama. En concreto, los agentes arrestaron a siete personas en Guadalajara, siete en la localidad madrileña de Coslada y uno más en Campo Real, también en Madrid
Los detenidos actuaban en perfumerías y ópticas de todo el país y distribuían después los bienes sustraídos en el mercado negro, principalmente en países del Este de Europa.
La investigación ha sido realizada por Unidad contra la Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) Central junto con las Brigadas Provinciales de Policía Judicial de Guadalajara, Toledo y Navarra. Con ellos han colaborado también agentes de las comisarías de Lérida y Marbella, y de los Mossos d'Esquadra de Lérida.
DESARROLLO DE LA OPERACIÓN
La investigación se inició gracias a los mecanismos de colaboración y coordinación policial, tras tenerse conocimiento de una organización compuesta por ciudadanos de origen rumano que estaba cometiendo robos con fuerza en diversos establecimientos comerciales de todo el territorio nacional.
Las primeras indagaciones permitieron localizar al líder de la organización en Guadalajara. Tras identificar a varios miembros del grupo, se comprobó que realizaban grandes trayectos en un día a diferentes localidades con el fin de localizar posibles objetivos.
Una vez que seleccionaban la ciudad, varios miembros de la organización se desplazaban hasta el lugar y sustraían un vehículo con el que cometer el robo. A continuación estudiaban el entorno, elegían el comercio y comprobaban las medidas de seguridad. Tras fracturar las lunas del local con mazas y hachas de acero, introducían los efectos en el vehículo y regresaban a Guadalajara. En este trayecto eran apoyados por un vehículo lanzadera que se encargaba de detectar posibles controles policiales.
La organización disponía de varios domicilios de seguridad, que eran utilizados para ocultar los bienes sustraídos. Dejaban pasar un tiempo prudencial antes de entregarlos a los miembros de la organización que se encargaban de su distribución en el mercado negro, principalmente en países del Este de Europa.
DETENIDOS Y EFECTOS INTERVENIDOS
Tras identificar plenamente a todos los miembros del grupo y los domicilios que empleaban se procedió a la detención de siete personas en Guadalajara, siete en la localidad madrileña de Coslada y uno más en Campo Real, también en Madrid. A todos se les imputan los presuntos delitos de asociación ilícita, robo con fuerza, robo/hurto de uso de vehículo y receptación.
Además, se han practicado cinco registros en los que se han intervenido numerosos utensilios empleados en la comisión de los robos (mazas, hachas de acero, radiales, taladros especiales para hormigón, patas de cabra...) y se han recuperado 3.000 perfumes y 1.500 gafas de primeras marcas, dos vehículos de alta gama y 26.000 euros en efectivo. El valor de los efectos recuperados asciende a 420.000 euros.
