MADRID, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
PSOE, Más Madrid, PP y Cs han rechazado reprobar al portavoz socialista en el Ayuntamiento, Pepu Hernández, por la situación administrativa de su chalet en lo que la portavoz del PSOE de Desarrollo Urbano, Mercedes González, no ve más que una "venganza de Vox".
La edil se refería así a que los socialistas sacaron adelante la reprobación del portavoz municipal de Vox, Javier Ortega Smith, por su respuesta a la violencia machista.
"Devuelva la calle a los madrileños porque no es suya", ha reclamado el concejal de Vox Pedro Fernández, quien ha acusado al portavoz de los socialistas de "construir su vivienda sin licencia", unido a que han descubierto "que dejó sin pagar parte al constructor y la otra se pagó en negro, en dinerito, sin facturas".
El delegado de Desarrollo Urbano, Mariano Fuentes, ha dado explicaciones de la situación administrativa de la vivienda de Hernández, en el distrito de San Blas-Canillejas, que estaría fuera de ordenación y en la que sólo se pueden ejecutar obras de conservación. La ampliación de la vivienda no fue autorizada pero fue ejecutada, una infracción urbanística que está prescrita según la Ley del Suelo.
Fuentes se ha negado a reprobar a Pepu Hernández porque este recurso es un "reproche moral a la gestión" de un político pero todo lo relacionado con su vivienda unifamiliar está "fuera de su acción política", ya que se levantó muchos años antes de llegar al Ayuntamiento. Por eso, "no procede, gracias a dios, su reprobación".
El delegado ha criticado la "ley del talión" que algunos aplican "para machacar al adversario" y ha defendido que desde el área se ceñirán al cumplimiento del ordenamiento jurídico y no perderán el tiempo "en analizar pasados de pepus o rocíos". Sobre la proposición de Vox ha dicho que no es más que "embarre" para mermar la confianza en la clase política.
La concejala socialista Mercedes González ha ironizado con el hecho de que a Ortega Smith le importara "un bledo" su reprobación porque tiene claro que la hoy presentada es su "venganza".
Y además ya no ve al concejal Pedro Fernández como un representante de la "extrema derecha valiente", ya que se ampara es que es aforado "para verter imputaciones falsas de delito sabiendo que el camino al Tribunal Supremo no es el mismo que para el resto".
"Esto es una caza de brujas, es una reprobación inmoral, una campaña de acoso contra una persona valiosa y honrada" y todo porque a Vox "la verdad no les importa, sólo la venganza". En la misma línea ha ido el concejal de Más Madrid José Manuel Calvo, que ha contrastado lo "envalentonado" que estaba hoy Pedro Fernández cuando en la pasada comisión no quiso ni tomar la palabra para defender a su presidenta en Madrid, Rocío Monasterio.
Y es que a Vox "el caso les da igual, lo que quieren es crear la sensación de todos los políticos son iguales, como su partido, dirigido por presuntos delincuentes". "Pero no, no somos lo mismo que los que justifican las palizas a homosexuales sino que somos los que defendemos los derechos del colectivo LGTB", ha espetado Calvo.
La reprobación no ha salido adelante por el rechazo de Más Madrid, PP, Cs y PSOE en una votación en la que Pepu Hernández se ha ausentado del hemiciclo. Vox ha insistido en su solicitud de reprobación y ha llegado a pedir la dimisión del portavoz del PSOE.
