Sucesos.- Detenido el asesino de la mujer que fue apuñalada cuando paseba con sus perros en Fuencarral

Actualizado: miércoles, 29 agosto 2007 20:52

Según vecinos, la víctima y el presunto agresor vivían en la misma calle, apenas a unos metros de distancia

MADRID, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Policía Nacional ha detenido al presunto asesino de Mónica T.G., de 27 años, que murió apuñalada hoy mientras paseaba con sus perros por un descampado del distrito de Fuencarral, informó a Europa Press un portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.

Tras producirse la agresión, familiares y amigos de la víctima se agolparon a las puertas del bloque donde supuestamente fue a refugiarse el agresor, en el número 12 de la calle Islas Bermudas, e intentaron superar el cordón policial desplegado ante el edificio.

Según una testigo del apuñalamiento que avisó al 091, Mónica mantuvo una fuerte discusión con el individuo que la atacó cuando ambos paseaban a dos perros por el descampado.

Minutos más tarde, poco después de las 11.30 horas, la joven apareció tendida en el suelo con varias heridas por arma blanca en la espalda, el abdomen y el pecho. Los sanitarios de Samur-Protección Civil atendieron a la joven, pero no pudieron hacer nada por salvar su vida y se limitaron a certificar su muerte, informó a Europa Press un portavoz de Emergencias Madrid.

LOS PERROS MORDIERON AL AGRESOR

Según pudo comprobar Europa Press, en el trayecto que une el descampado de la agresión y la vivienda acordonada por la policía hay pisadas de sangre.

En este sentido, parece que, al presenciar cómo apuñalaban a su dueña, los perros de Mónica mordieron al agresor que, sangrando, se dirigió hacia la citada vivienda, cercana al lugar donde se produjo el asesinato, informó a Europa Press un testigo de los hechos.

Los primeros familiares que se presentaron en el lugar, que llegaron a ver a la joven aún tendida en el suelo, tuvieron que ser atendidos por los psicólogos de Samur-Protección Civil.

Según algunos vecinos consultados por Europa Press, la víctima y el presunto agresor vivían en la misma calle, apenas a unos metros de distancia y les unía alguna relación.