Torrelodones.- Aplazada la construcción de emisarios de aguas residuales para no interferir la cría del águila imperial

Actualizado: lunes, 17 abril 2006 20:09

TORRELODONES, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Comunidad de Madrid ha ordenado el aplazamiento de las obras de construcción de los emisarios de aguas residuales de Torrelodones para evitar la coincidencia de los trabajos con la época de reproducción y cría del águila imperial ibérica que habita en la zona. Los trabajos se paralizarán durante cuatro meses.

La noticia fue dada a conocer hoy por el alcalde de la localidad, Carlos Galbeño, durante la visita a la Estación Depuradora de Aguas Residuales de Galapagar y Torrelodones. El regidor indicó que "a pesar de las dificultades a las que se ha enfrentado la ejecución del proyecto, los trabajos que lleva a cabo el Canal de Isabel II se encuentran muy avanzados y podrían haber estado terminados este verano de no haber surgido este nuevo contratiempo".

Galbeño recordó que, aunque la competencia en esta materia es de la Comunidad de Madrid desde comienzos de la presente legislatura, "el Ayuntamiento se marcó como máxima prioridad colaborar con el resto de entidades implicadas para erradicar los vertidos al cauce del río Guadarrama. A pesar de lo largo del proceso, me consta que ninguna de las administraciones ha dejado pasar un solo día sin trabajar en la construcción de los emisarios".

OTRO NIDO YA OBLIGÓ A CAMBIAR EL LUGAR

El proceso para la construcción de la EDAR (Estación Depuradora de Aguas Residuales) de Galapagar y Torrelodones comenzó en 1986 con los trabajos previos para la redacción del proyecto. Dos años después, ambos ayuntamientos firmaron un convenio de actuaciones con la Comunidad de Madrid para la construcción de la EDAR y sus emisarios, que permitirían dar servicio a 60.000 habitantes, con la posibilidad de ampliar su capacidad para cubrir la necesidad de hasta 90.000.

En 1988, la aparición de un nido de águilas imperiales obligó a cambiar la ubicación de la EDAR, pero el lugar elegido como alternativa se descartó de nuevo como consecuencia de la creación del Parque Regional de la Cuenca Media del Río Guadarrama que afectaba a los terrenos elegidos.

Finalmente, la depuradora se instaló en el espacio que actualmente ocupa, en el término municipal de Galapagar, lo que a su vez originó un replanteamiento del proyecto de emisarios, al quedar ubicada en una cota más alta que Torrelodones. Este hecho motivó que la infraestructura de canalizaciones deba bombear el agua hasta en tres ocasiones para superar los desniveles. Hasta la nueva paralización, señalaron fuentes municipales "las previsiones hacían pensar que después del verano los emisarios podrían conectarse por fin con la depuradora".