Un total de 5.487 madrileños mayores de 34 años murió por tabaquismo en 2005

Un cigarro en un cenicero
TOMASZ SIENICKI
Actualizado: domingo, 24 octubre 2010 13:30

Dos tercios de las muertes por tabaquismo se deben a cáncer de pulmón, EPOC, cardiopatía isquémica y enfermedad cerebrovascular

MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -

Un total de 5.487 madrileños mayores de 34 años murieron por tabaquismo en 2005, lo que supone el 13,8 por ciento de todos los fallecimientos ocurridos en individuos de 35 y más años de edad, según indica el informe de 'Vigilancia del consumo, exposición ambiental a humo de tabaco y efectos sobre la salud en la Comunidad de Madrid, consultado por Europa Press.

En concreto, 4.797 de las muertes atribuibles al tabaquismo (un 87,4 por ciento) ocurren en varones y el 12,6 por ciento (690) en mujeres. Estas cifras suponen el 23,9 por ciento de todas las muertes ocurridas en varones (una de cada 4 muertes) y el 3,5, en mujeres (una de cada 29), destacando que 1.612 muertes, casi un tercio de las atribuibles al tabaquismo, son muertes prematuras ocurridas antes de los 65 años (35-64 años de edad).

Dos tercios de las muertes ocurridas por el tabaco se debieron a cuatro causas: cáncer de pulmón (34,1 por ciento), enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) (19,6 por ciento), cardiopatía isquémica (10,5 por ciento) y enfermedad cerebrovascular (5,8 por ciento).

En los hombres, predominó el cáncer de pulmón (35,2 por ciento de las muertes atribuibles al tabaquismo), seguido de la EPOC (19,7 por ciento), la cardiopatía isquémica (10,4 por ciento) y, en cuarto lugar, la enfermedad cerebrovascular (5,3 por ciento).

En las mujeres, se observó una distribución similar con un predominio también de las muertes por cáncer de pulmón (26,2 por ciento), seguido de la EPOC (19,4 por ciento), la cardiopatía isquémica (11,0 por ciento) y la enfermedad cerebrovascular (8,8 por ciento).

Respecto a la evolución, mientras en los hombres se observa un descenso desde la segunda parte de los noventa (alrededor de 20 años de retraso respecto a la epidemia de consumo de tabaco, que alcanzó el máximo en la segunda parte de los setenta), en las mujeres, la mortalidad por esta causa aumenta gradualmente desde finales de los ochenta.