Tranquilidad en Metro en la quinta jornada, donde a primera hora ha aumentado un 16% la demanda respecto a ayer

Actualizado: viernes, 2 julio 2010 10:53

MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

La quinta jornada de huelga en Metro de Madrid, la tercera con servicios mínimos, presenta desde primera hora de la mañana un escenario de tranquilidad y, según explicó un portavoz de la compañía a Europa Press, la demanda ha aumentado en el tramo de 6 a 7 horas un 16 por ciento respecto al día de ayer.

Precisamente ayer el Metro podía volver a circular después de dos días con la red totalmente cerrada por el incumplimiento de los servicios mínimos por parte de los cinco sindicatos más representativos en la compañía (Sindicato de Conductores, CC.OO., UGT, Solidaridad Obrera y Sindicato Libre).

Después de martes y miércoles sin trenes de Metro en la Comunidad, los usuarios ayer todavía estaban algo reacios a acercarse a las estaciones, lo que provocó un descenso de un 27 por ciento de demanda respecto al mismo día en el año anterior, un dato al que hay que sumarle además de la incertidumbre de los viajeros, el comienzo de la primera fase de vacaciones de verano.

Este viernes, a las 8.30 horas, los servicios mínimos fijados en un 50 por ciento se están cumpliendo en su totalidad y no se están registrando retrasos en las estaciones más allá del doble de espera que un día habitual en hora punta. Los intervalos de trenes en hora valle serán mayores, según se desprende de estos mínimos establecidos.

Mientras tanto, las conversaciones entre la Dirección de Metro y todos los representantes sindicales continúan --de manera oficial esta huelga indefinida sólo está convocada por Solidaridad Obrera--. En la tarde del jueves tuvo lugar el primer encuentro que salió sin acuerdo pero que sirvió para que ambas partes pusieran sobre la mesa su postura.

Desde la compañía manifestaron su desacuerdo con el incumplimiento de los servicios mínimos, por lo que pidieron explicaciones al respecto y, pese a todo, mostraron su intención de continuar con el diálogo. Por su parte, los sindicatos tildaron de abusivos los servicios mínimos y mantuvieron su postura sobre el convenio colectivo: respeto al máximo.