MADRID, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
Patricia R.S, acusada de asesinar en mayo de 2004 a su bebé recién nacido en su casa de Moralzarzal, negó hoy, en el juicio que celebra la Audiencia Provincial de Madrid contra ella, los hechos que se le imputan y aseguró que su hijo nació sin vida tras darle a luz en el baño del domicilio en el que vivía con sus padres.
Un jurado popular comenzó esta mañana a juzgar a la acusada, para quien la Fiscalía solicita 20 años de prisión por un delito de asesinato, con la agravante de parentesco.
El escrito de acusación relata que la joven, de 23 años, dio a luz en su casa a un niño, ocultando el parto a sus padres, quienes tampoco tenían constancia de que estaba embarazada. Nada más nacer, la chica llenó la boca del bebé con papel de celulosa y le presionó fuertemente la nariz y la boca hasta producirle una parada cardio-respiratoria.
Durante su declaración, Patricia R.S negó tales extremos, asegurando que pensó que era un aborto por las pérdidas de sangre que sufrió durante las horas previas al parto. Tras intentar reanimar al bebé, según explicó, metió el cadáver en una bolsa y lo escondió durante un día en el armario.
"Le envolví en una toalla y me fui a la habitación. Lo dejé escondido en un armario porque ya no había solución", relató la chica, quien un día después introdujo la bolsa en el maletero de su coche y se desplazó hasta la universidad.
Al volver de la universidad, la procesada vio unos contenedores y decidió tirar la bolsa con el bebé en el interior. "Lo deje dentro. Era terrible, pero ya no se podía hacer nada", se lamentó Patricia R.S, que aseguró al tribunal que ocultó el embarazo por miedo "a la situación de ser madre con 19 años".
