Usuarios de Alitalia en Barajas esperan "alguna medida" para que la crisis de aerolínea no afecte a sus planes

Actualizado: domingo, 14 septiembre 2008 16:54

MADRID, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los pasajeros que se disponían hoy a viajar con la aerolínea italiana Alitalia desde el aeropuerto de Madrid-Barajas se mostraron expectantes ante el anuncio de la posibilidad de que la compañía suspenda algunos de sus vuelos a partir del próximo lunes y con la esperanza de que se tome "alguna medida" que afecte lo menos posible a sus planes.

En declaraciones a Europa Press Televisión, uno de los pasajeros que esperaba para facturar en uno de los mostradores de Alitalia en la Terminal 2 de Barajas rumbo a Sicilia, Javier, tenía la esperanza de que "al ser una compañía de bandera pongan alguna medida, esperemos que esté solucionado antes de que volvamos el día 23", comentó.

"Vamos a ver qué pasa, y si no pues nos quedaremos a vivir en Sicilia, no nos importaría" bromeó Javier. Junto a él, Ángela, que se encontraba con su pareja esperando en la cola de facturación, también se preguntaba si los recortes de la aerolínea afectarían a sus vacaciones en Catania (Sicilia). "Volvemos el 21, espero poder volver y si no a ver cuál es la solución que nos dan a los usuarios", añadió.

"Al final siempre somos los usuarios los que salimos fastidiados" se quejó Ángela, quien aseguró que "el combustible sube, las compañías siguen ganando pasta" y los usuarios siguen siendo los que pagan todas las diferencias.

Por su parte, un pasajero de origen italiano que aguardaba para volver a Roma, Massimiliano, comentó en su lengua nativa su temor a no poder volar hasta Italia hoy mismo por las posibles suspensiones de vuelos previstos. "Estamos en lista de espera, esperamos poder salir hoy, sino sería un gran problema", dijo.

"Corremos el riesgo de tener que quedarnos en Madrid hasta mañana o quién sabe" observó este usuario habitual de Alitalia, al que sin embargo no le sorprende la situación actual de la aerolínea ya que en su opinión se ha convertido en algo "típicamente italiano" en las compañías de bandera del país desde la llegada de Berlusconi al Gobierno.