MADRID, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
Fiat Chrysler Automobiles (FCA) ha caído un 1,50% este lunes en la Bolsa de Milán, tras conocerse el sábado pasado que Sergio Marchionne sería reemplazado permanentemente como consejero delegado del consorcio automovilístico italoestadounidense y de Ferrari por problemas de salud.
En el primer día de cotización de la multinacional sin Marchionne al frente, las acciones de FCA han cerrado la jornada bursátil a 16,17 euros por título.
La compañía nombró a Mike Manley, responsable de Jeep, nuevo consejero delegado de Fiat Chrysler en sustitución del italiano, que debía renunciar el próximo mes de abril, pero las dificultades sufridas tras una operación de hombro han acelerado su retirada.
"La situación de Marchionne se ha deteriorado en las últimas horas. Su situación actual era impensable hasta hace unas horas y ha despertado en todos una enorme sensación de injusticia", señaló la compañía.
El presidente del grupo, John Elkann, expresó su "dolor" por la marcha de la compañía Marchionne después de 14 años, pero aseguró que con Manley FCA se asegura la "máxima continuidad".
Este lunes también se ha conocido la marcha del grupo de Alfredo Altavilla, director de operaciones de FCA en Europa, Oriente Próximo y África (EMEA), en busca de otros intereses profesionales. Altavilla trabajará junto a Manley, también nombrado jefe interino de operaciones de la firma para la región de EMA, hasta finales de agosto para garantizar una "transición suave".
Pese a la salida de Marchionne de FCA, la agencia de calificación crediticia S&P Global Ratings mantiene la perspectiva 'positiva' de la compañía, con un rating a largo 'BB+': capacidad incierta en el largo plazo y gran sensibilidad a entornos adversos. En el corto plazo, S&P Global Ratings le da un grado de especulación 'B': capacidad débil con evolución incierta muy limitada por condiciones el entorno.
PLAN ESTRATÉGICO
Fiat Chrysler está inmersa en un plan estratégico a través del que prevé invertir 9.000 millones de euros en vehículos híbridos y eléctricos durante los próximos cinco años, con el fin de eliminar de su producción todos los motores diesel antes del año 2021.
Con esta inversión en coches menos contaminantes, el fabricante de automóviles busca cumplir con todas las normas sobre emisiones, además de duplicar el actual beneficio operativo antes del año 2022.
El objetivo de dicho plan es llegar a los 16.000 millones de euros en beneficio ajustado antes de impuestos e intereses ese año, lo que supone aumentar en más de 9.000 millones de euros el resultado del pasado ejercicio, que fue de 6.600 millones.
Además, tal y como anunció la compañía el pasado 1 de junio, otro de los principales objetivos pasa por alcanzar el grado de inversión antes del año 2022. En concreto, la firma quiere depositar toda su confianza la marca Jeep, ya que representará uno de cada 12 vehículos de pasajeros vendidos por toda la industria dentro de cinco años, según el propio Marchionne
FCA también pronosticó que las ventas de sus vehículos se incrementarán un 7% cada año durante los próximos cinco años y que la cantidad de dividendos ascenderá a 6.000 millones de euros en los próximos cinco años.
